Emir Olivares
La Jornada
México, DF. Amnistía Internacional (AI) indicó que tras examinar las pruebas presentadas contra el vocero de la Tribu Yaqui, Mario Luna Romero –a quien la semana pasada se le dictó auto de formal prisión por su presunta participación en los delitos de privación ilegal de la libertad y robo de vehículo—, existe el riesgo que la causa penal en su contra “esté sesgada y sea por motivación política”.
Esto debido a la lucha que Luna Romero y su comunidad han emprendido contra la construcción y operación del Acueducto Independencia, el cual extrae agua del Río Yaqui, perjudicando los derechos de este pueblo originario de Sonora.
AI alertó que el vocero Yaqui está en riesgo de ser sometido a un juicio injusto. “Con frecuencia en México los activistas indígenas como Mario Luna enfrentan casos penales falsos formulados para disuadirles de continuar con sus reclamaciones legítimas de derechos humanos”, aseveró Perseo Quiroz, director ejecutivo de AI México.
La organización internacional recordó que los gobiernos estatal y federal no han obtenido el consentimiento libre, previo e informado de la comunidad para la operación del proyecto, lo cual ha sido reconocido por la propia SCJN, que ha ordenado que se tomen medidas correctivas.
