MARGENA DE LA O
La Jornada
Chilpancingo, 23 de septiembre. Trabajadores contratados a través del programa Guerrero Cumple, para elaborar los uniformes escolares gratuitos para niños del sistema escolar básico en el estado, bloquearon la avenida Juárez porque fueron despedidos por la directora de Política Pública, Mariana García Guillén, y se niega a darles una liquidación justa, según expresaron.
Además, denunciaron, las cifras de trabajadores están alteradas, porque el gobierno estatal maneja 240 y los que maquilaban 150 mil uniformes cada inicio de clases son entre 120 y 130 trabajadores. Sospechan desvío de recursos.
Para confeccionar los uniformes de este año escolar que inició en agosto, los trabajadores fueron contratados en marzo pasado, con una meta de crear 888 camisas o pantalones diarios. Algunos fueron despedidos el 31 de julio y otros exactamente un mes después, sin que les pagaran sus horas extras.
La comisión de trabajadores, que dio la información a los reporteros durante el bloqueo, informó que la contratación era diferente para cada trabajador; había algunos que ganaban 3 mil 570 pesos al mes, y otros, 4 mil 700. En base a esos salarios, y por los meses de trabajo quieren su liquidación, pero sólo les ofrecen de 380 pesos a 3 mil 800 pesos, dijeron.
Exigen también, reportó el grupo, el pago de horas extras que invirtieron. Uno de los empleados comentó que saben, por un comunicado del propio gobierno estatal, que destinaron un millón y medio de pesos para la liquidación de los trabajadores que confeccionaron los uniformes en la planta maquinadora de El Ocotito.
El gobernador Ángel Aguirre Rivero, en campaña, cuando aspiraba al cargo, prometió que contrataría a madres solteras para esa tarea, y le garantizaría sus derechos.
Desde que inició ese programa, las condiciones de los trabajadores contratados fueron las mismas, por ejemplo, explicó uno de ellos, los contrataron en mayo y los despidieron el 15 de diciembre para no darles aguinaldo.
El mes que se quedaron algunos trabajadores supuestamente todavía contratados, empaquetaron y cargaron los uniformes para ser distribuidos, en total, 130 horas extras que no les pagaron.
Los trabajadores mantuvieron su bloqueo en la avenida Alvarez a la altura de calle Hidalgo, sin obtener respuesta a su demanda de una liquidación por persona de entre 10 mil y 15 mil pesos.
