Sayda Chiñas Córdova
La Jornada
Coatzacoalcos, Ver.- La empresa Constructora del Sureste enfrenta 60 demandas de municipios y proveedores; y 20 más de un grupo de 500 trabajadores a quienes les adeudan varias semanas de salario y liquidación; la próxima semana se ejecutará un embargo a varios activos de la empresa en la sierra de Santa Marta.
Tras la desaparición de José Manuel Flores Ríos, alias El Oaxaco en febrero del año 2013, la empresa constructora inició un proceso de declive, ya que los accionistas y responsables no responden por los contratos firmados con el gobierno del estado y los municipios.
Honorio Matías Santiago, ex supervisor de la empresa constructora indicó que existen varias demandas contra la empresa, pero el nuevo responsable Jorge Flores Ríos, hermano de El Oaxaco, no quiere reconocer los adeudos.
Refirió que Constructora del Sureste tiene en su contra más de 60 demandas ante el Ministerio Publico (MP) hechas por autoridades municipales por incumplimientos de obras y 20 denuncias ante conciliación y arbitrajes, por no haber pagado los salarios a más de 500 trabajadores.
“A muchos trabajadores que empleaba en diferentes áreas la Constructora del Sureste nunca les pagó o los liquidó, por eso se presentaron varias demandas ante el Tribunal de Conciliación y Arbitraje, y cuando llegaron a buscar los proveedores de materiales sucedió lo mismo, que nunca les pagaron”.
En una entrevista con el ex supervisor de obras de la constructora refirió que después de la desaparición del empresario la empresa no respondió por el dinero recibido como adelantos de obras.
El también ex síndico de Tatahuicapan informó que el gobierno del estado le entregó más de 400 millones de pesos para que avanzaran en la construcción de las 159 obras que se le asignaron por la presión del consejo de gobierno indígena popular.
Carreteras, puentes y obras de saneamiento quedaron pendiente en los municipios de Moloacán, Sayula de Alemán, Zaragoza, Oteapan, Texistepec, Pajapan, Mecayapan Chinameca y Tatahuicapan. Expuso que en algunas de las obras proyectadas sólo se dieron los banderazos de arranque y la empresa no asumió su responsabilidad, por lo que se presentaron varias denuncias contra los ahora responsables.
Se espera que la próxima semana se concrete el embargo de la maquinaria y los predios que tiene la constructora en toda la sierra de Santa Marta.
