Andrea Becerril y Víctor Ballinas
La Jornada
La campaña contra Andrés Manuel López Obrador, al pretender vincularlo con el alcalde prófugo de Iguala, José Luis Abarca, “denota la enorme preocupación que el PRI y el gobierno federal tienen” en torno a la capacidad de convocatoria del tabasqueño y al crecimiento electoral del Movimiento de Renovación Nacional (Morena), advirtió el senador del PRD, Alejandro Encinas.
Advirtió que es el ex dirigente del PRD, Jesús Zambrano, quién debe explicar la relación estrecha que mantenía con Abarca.
Cuestionado sobre la calificación de demagogo al dirigente de Morena, que formuló Zambrano, el senador Encinas respondió que “el mayor acto de demagogia” es del ex presidente perredista, quién “no quiere exculparse no sólo por la candidatura de Abarca a la presidencia municipal de Iguala, sino por el desarrollo y promoción de su esposa, María de los Angeles Pineda Villa, dentro del partido, durante su dirección”.
Tan es así, agregó, que Zambrano se reunió con Abarca, después del asesinato de seis estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa y de la desaparición de otros 43 jóvenes.
Ello es un ejemplo, dijo, de la ascendencia del entonces presidente del PRD en el alcalde de Iguala. “La relación entre Abarca y Zambrano queda muy clara, en el momento en que es la única persona que busca después de los hechos de Iguala”.
El senador Encinas agregó que aunque Abarca ya había pedido licencia, se sabía que había responsabilidades, no tenía aún orden de aprehensión y Zambrano no estaba obligado a dar aviso a las autoridades.
Recalcó que en ese contexto se da la nueva campaña sucia contra López Obrador. “Es también una forma de eludir la verdadera responsabilidad, porque López Obrador no registró candidatos, no es ministerio público y quienes tenían información respecto a los vínculos de Abarca con el crimen organizado, su eventual participación en secuestros y homicidios, son autoridades que tienen facultades y responsabilidades legales, como son el procurador general de la república (PGR), el secretario de Gobernación, el director del Cisen, el gobernador del estado, el procurador de Justicia del estado, que tiene responsabilidades claras”.
Insistió: “Buscar la paja en el ojo ajeno y querer voltear la mirada para distraer de los problemas del Tamaulipas, estado de México y Veracruz, los tres estados donde ha crecido más la violencia y la inseguridad es un mal distractor, porque eso no resuelve el problema, que sigue creciendo en todo el país”.
En entrevista por separado, el ex senador perredista y actual secretario de Gobierno de Tabasco, Cesar Raúl Ojeada, rechazó que López Obrador tenga que acudir ante la PGR, para aclarar sus supuestos vínculos políticos y personales con el depuesto alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez.
Sostuvo que el líder de Morena “es un personaje muy vertical y totalmente ajeno a cualquier relación con este personaje.”.
Entrevistado después de inaugurar junto con el presidente del Senado, Miguel Barbosa Huerta, la Semana Cultural de Tabasco, en el patio central del Senado, Ojeda Zubieta declaró que aun cuando mantiene diferencias con el líder moral de Morena, López Obrador es una persona transparente ajena a ligas con políticos involucrados con el narcotráfico.
