Redacción Proceso
MÉXICO, D.F., (apro).- Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano calificó de “sesgada y por consigna” la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de rechazar las consultas populares que el PRD y el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) pretendían realizar, por separado, para revertir la reforma energética.
“Lo grave es la interpretación sesgada, anticipada, yo diría por consigna o por quedar bien con el Ejecutivo [SIC]”, señaló el excandidato presidencial en entrevista con Radio Fórmula.
[No, tampoco es por consigna de ese pendejazo al que Cárdenas (viejo simulador) llama el «Ejecutivo». Es por consigna de las trasnacionales petroleras que ya tenían firmados y entregados contratos para saquear nuestro petróleo desde el 2000.]
Y advirtió que la lucha no ha concluido y continuará con los esfuerzos necesarios para echar atrás la reforma energética, porque aún se puede recurrir a instancias internacionales o buscar la mayoría electoral para 2015 para ser apoyado por el Congreso. [O sea, se pretende continuar tomándole el pelo a la gente con más simulación, pues las «instancias internacionales» no harán absolutamente NADA, porque tales instancias, igual que la SCJN, también son empleadas de las trasnacionales y este maldito carcamán perredista lo sabe.]
“Habrá otros recursos en el caso de nuestra propia legislación para buscar echar abajo estas medidas”, subrayó.
De acuerdo con el exjefe de Gobierno del Distrito Federal, los nueve magistrados que votaron en contra de la consulta ciudadana “no merecen la confianza y la responsabilidad que el Estado mexicano ha depositado en ellos”.
Eso, dijo, deja ver la clase de ministros que tiene la Suprema Corte de Justicia de la Nación, menos uno, José Ramón Cossío.
La consulta ciudadana, agregó, no representa la modificación de tasas de impuestos en materia de petróleo, ni la falta de ingresos para el Estado.
Por nueve votos contra uno, el pleno de la Corte declaró ayer improcedente e inconstitucional las consultas populares promovidas por Morena y el PRD, con el argumento de que los ingresos del Estado se verían afectados.
Se trata del mismo criterio que el máximo tribunal utilizó esta semana para rechazar la consulta popular propuesta por el Partido Acción Nacional (PAN) con el propósito de revisar el monto del salario mínimo.
La pregunta de Morena era: “¿Estás de acuerdo o no en que se otorgue contratos o concesiones a particulares, nacionales o extranjeros, para la explotación del petróleo, el gas, la refinación, la petroquímica y la industria eléctrica?”
La del PRD era más genérica: “¿Está de acuerdo en que se mantengan las reformas a los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución en materia energética?”.
De acuerdo con el criterio mayoritario de la Corte, ambas preguntas son contrarias al artículo 35, fracción VII, apartado tercero de la Constitución, en el sentido de que los temas relacionados con los ingresos y gastos del Estado no pueden ser objeto de consulta popular.
