Redacción Proceso
MÉXICO, D.F. (apro).- Un centenar de personas ataviadas con playeras blancas y ataúdes al hombro salieron a las calles de Apatzingán, Michoacán, para exigir la salida de la Policía Federal tras su actuación en el operativo realizado el martes pasado para desalojar el palacio municipal, donde fue capturado Jesús Méndez El Chuchín, hijo de Jesús Méndez Vargas, El Chango, detenido en junio de 2011.
Entierran a víctimas de enfrentamiento entre autodefensas y militares en Apatzingán.
Foto: AP / Rebecca Blackwell
Los manifestantes se plantaron frente a la sede del gobierno municipal con los ataúdes y pancartas en las que exigen la salida de la PF y una investigación a fondo por el supuesto enfrentamiento ocurrido el pasado 6 de enero que, afirman, fue más bien una masacre.
En una de las mantas se leía la siguiente petición: “Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, procurador de Justicia, Jesús Murillo Karam, exigimos la detención de los policías federales y militares involucrados en la masacre”.
Otra: “No más violencia por favor, queremos paz”.
Los inconformes se trasladaron luego a hacia la avenida Constitución de 1814, donde ocurrió el segundo enfrentamiento la mañana del pasado martes en el que, según el reporte oficial, ocho personas fueron abatidas.
En su recorrido lanzaron consignas contra el comisionado federal, Alfredo Castillo, a quien responsabilizan de los hechos del pasado 6 de enero y del clima de violencia que prevalece en la entidad.
También reiteraron su exigencia de liberar a los 44 detenidos ese mismo día durante el desalojo del palacio municipal por parte de la PF y el Ejército.
