México, 17 de febrero 2015 (NOTIGODÍNEZ).- Que los medios ya no reporten los casos de violencia escolar porque el tema ya «pasó de moda», no significa que dejen de estar ocurriendo. Por el contrario, resulta muy preocupante que el fenómeno siga adelante en medio del silencio de la prensa y la complicidad de las falsas «autoridades» de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Pero, ¿qué puede esperarse de esa «institución» secuestrada por el autor intelectual de la masacre de Acteal? El sujeto priista de nombre Emilio Chuayffet, autonombrado «secretario de educación pública», está denunciado en cortes internacionales junto a su entonces patrón Ernesto Zedillo por la matanza de 45 indígenas en Acteal, Chiapas, en 1997, entre ellos mujeres y niños. Como es arriba es abajo, y así está la situación en las escuelas públicas de todo el país: podrida.
Medios locales reportaron un nuevo caso de «bullying» en la ciudad de Tampico, perteneciente al violento estado de Tamaulipas, donde un estudiante de la Escuela Secundaria Federalizada “Tirso González Saldivar” fue arrojado desde un segundo piso de las instalaciones del plantel, por una compañera durante el recreo. Tras la peligrosa caída, el alumno resultó con ambos brazos fracturados.
La madre del niño lesionado denunció que las «autoridades» de la escuela se deslindaron del incidente, negándole apoyo para cubrir los costes de hospitalización de su hijo, curaciones, tratamientos posteriores y otros gastos. La directiva escolar argumenta que los hechos ocurrieron durante un receso, por lo que según ellos no hay responsabilidad alguna pese a que la agresión se dio al interor del plantel.
Tras la respuesta de la directiva, la madre denunció el caso ante los medios de comunicación revelando que cobran cuotas a los padres de familia por un supuesto «seguro escolar» para los estudiantes. Hasta el momento, el niño sigue hospitalizado en el nosocomio Carlos Canseco de Tampico y la familia está corriendo con todos los gastos médicos.
Asimismo, la madre señaló que su hijo acusa a una alumna llamada Erica Fabiola de haberlo empujado al vacío. Sin embargo no ha sido sancionada y las «autoridades» de la escuela ni siquiera han investigado el asunto entre los demás compañeros que presenciaron la agresión.
Aunque tras la caída el niño sólo resultó con fracturas en los brazos y golpes en torso y piernas, el hecho pudo haber sido más grave y la víctima no podrá regresar a la escuela en todo el tiempo que dure su recuperación.
Medios locales informaron que en la Secretaría de Educación en Tamaulipas ya se investiga el «incidente», según fuentes anónimas al interior de la dependencia, al tiempo que se han acercado a proporcionar asistencia necesaria a la madre de familia así como a su hijo a efecto de que se pueda restablecer plenamente. Sin embargo, no precisaron si la secretaría cubrirá los gastos u obligará a los padres de la presunta agresora a pagarlos. Tampoco dijeron si se actuará por el cobro ilegal de cuotas a cambio de un «seguro» que no le pagaron al afectado.
Al parecer están perfilando dar impunidad a las «autoridades» de la escuela, pues reconocieron que el hecho sucedió un día de clases pero «durante un receso», por lo cual los alumnos no se encontraban al interior del salón. Como si eso eximiera a los responsables de vigilar el orden en el plantel escolar y castigar a quienes agreden a sus compañeros.
