México, 13 de marzo 2015 (NOTIGODÍNEZ).- La periodista Carmen Aristegui Flores, conductora de la primera emisión de Noticias MVS y colaboradora estrella de ese grupo radiofónico, repudió esta mañana el despido de los reporteros que integraban de la Unidad de Investigaciones Especiales del informativo que conduce, Daniel Lizárraga e Irving Huerta, luego de que la empresa «perdiera la confianza en ellos» por el uso de su marca en el proyecto MéxicoLeaks.
Carmen Aristegui manifestó su rechazo “categórico” al cese de ambos colaboradores, quienes destaparon fuertes escándalos de corrupción del actual régimen usurpador como el burdel operado con recursos públicos en la sede del PRI capitalino, al servicio de su entonces líder, Cuauhtémoc Guitérrez de la Torre; o la onerosa mansión de Sierra Gorda 150 en las Lomas de Chapultepec, con valor de 150 millones de pesos, que Grupo Higa entregó a Peña Nieto –usando a su mujer de prestanombres– a cambio de contratos millonarios de obra pública.
“Rechazamos categóricamente el despido de nuestros compañeros. Esta decisión instrumentada por la administración de MVS afecta clara y seriamente nuestro trabajo y nuestra generación de contenidos a la audiencia”, declaró la periodista al iniciar su noticiero de hoy.
«Nosotros dijimos, no peleamos con un asunto de esta naturaleza y optamos por mantenernos al aire y no caer en esa circunstancia creada para eso. Seguimos en nuestro trabajo diario haciendo lo que hemos hecho hasta el momento […]. La respuesta fue despedir a dos periodistas que deberían ser premiados. Dos periodistas […] que han dado a la sociedad mexicana un trabajo de primer nivel, valiente, responsable, un trabajo que debería ser reconocido y no castigado», consignó.
En seguida denunció que esa acción “unilateral” por parte de la emisora no le fue notificada, sin embargo anunció que ella se mantendrá al aire “en defensa de este espacio” con la anuencia de todo su equipo de trabajo, incluyendo a los hoy cesados Lizárraga y Huerta. No obstante, exigió la restitución inmediata de ambos.
«Hemos hablado Daniel Lizárraga, Irving Huerta y todo nuestro equipo de trabajo sobre el significado de su despedida. Sobre si caer o no en esto que parece provocación para romper. Y hemos decidido que no. Que lo importante es mantenernos al aire. Que si MVS, como dice su comunicado, nos invita a continuar haciendo nuestra tarea, lo haremos, pero con Irving y Daniel aquí.
«Nuestro llamado a MVS es que los reinstale voluntariamente y sin recurrir a ningún elemento que pudiera permitirnos hacer valer lo que contractualmente hemos acordado. El llamado es a que Daniel Lizárraga e Irving Huerta estén de regreso aquí, sumándose con el resto del equipo a nuestra tarea cotidiana.»
Desde el pasado miércoles, la empresa MVS cuestionó el uso de su marca “sin autorización expresa”, y anticipó que “tomaría las medidas pertinentes y necesarias a fin de que sus recursos humanos y tecnológicos, financieros y materiales no sean utilizados para fines distintos a los que fueron creados y sirvan a intereses particulares que nada tienen que ver con el periodismo”.
Mediante desplegados pagados en diarios de circulación nacional y mensajes institucionales en los cortes comerciales de sus noticieros, MVS se deslindó del proyecto MéxicoLeaks y repudió que se incluyera la «marca MVS» entre los participantes de ese proyecto, sin mencionar a Carmen Aristegui pero en clara alusión a ella, pues fue la conductora quien hizo el anuncio de la incorporación del equipo de MVS a la plataforma MéxicoLeaks.
En respuesta, Aristegui comentó ayer por la mañana, antes de que se revelara el cese de sus colaboradores, que: “Seguimos haciendo nuestro trabajo. Si alguien quiere crear un pleito artificial aquí, no cuenten con nosotros; apostamos porque este espacio se mantenga abierto, libre, independiente y haciendo periodismo para la audiencia. Este espacio está con la apuesta de mantenerse trabajando mañana tras mañana”. Horas más tarde se dio a conocer el despido de los reporteros.
En redes sociales, miles de cibernautas han expresado su apoyo a la conductora y su repudio contra el empresario Joaquín Vargas, dueño de MVS, quien podría estar fraguando el eventual despido de Carmen Aristegui para lisonjear al régimen usurpador y obtener privilegios en la rebatiña por el sector de telecomunicaciones, a decir de la comunidad tuitera.
