México, 18 de marzo 2015 (NOTIGODÍNEZ).- Indígenas del Valle de San Quintín, Baja California, que trabajan como jornaleros, protestaron contra la explotación de que son objeto al ganar entre 110 y 120 pesos al día desde hace varios años, sin derecho a prestaciones básicas, como afiliaciones al Seguro Social o primas vacacionales.
Los manifestantes iniciaron un recorrido pacífico de varios kilómetros por el Valle de San Quintín y arribaron al Centro de Gobierno del Estado a las 9:30 horas (tiempo local, 11:30 horas del Centro). Al llegar al lugar, solicitaron diálogo con las «autoridades estatales», encabezadas por el Subsecretario de Gobierno, Pablo Alejo Núñez.
El diario Reforma confirmó que en todo momento, la protesta de los inconformes fue pacífica y siempre fueron respetuosos, tanto del libre tránsito de los ciudadanos como de sus «interlocutores».
No obstante, de acuerdo con el diario, los jornaleros y las «autoridades» encabezadas por el «Subsecretario de Gobierno», Pablo Alejo Núñez, no llegaron a ningún acuerdo, por lo que elementos policiacos dispersaron a los manifestantes haciendo uso de balas de goma y gas lacrimógeno. Ningún trabajador traía armas, pero utilizaron piedras para tratar de alejar a los granaderos que los atacaban mientras huían.
«Los policías hicieron detenciones con el uso de la fuerza y en algunos casos hasta cinco elementos golpearon a jornaleros», refiere textualmente el diario Reforma.
Foto: Reforma
Los indígenas explotados pedían audiencia con el «gobernador» panista Francisco Vega LaMadrid, pero éste sólo ha enviado a funcionarios menores, entre ellos a Moisés Dávalos, delegado de la Secretaría de Gobierno en San Quintín, quien ofreció mesas de diálogo por comunidad o colonia. Sin embargo, rechazó categóricamente la exigencia de los jornaleros para que su «gobernador» (JA) les dé la cara.
«No va a venir el gobernador. Nosotros vamos a trabajar aquí, daremos respuestas conforme a derecho», sentenció.
Los jornaleros agredidos exhibieron restos de balas de goma con los que policías dispersaron un contingente ayer. «¿Con esto es con lo que nos ayudan? Éstas son sus buenas intenciones», gritó uno de los jornaleros.
Tras la agresión policiaca, «autoridades» estatales reportaron tres detenciones de líderes jornaleros acusados de «obstrucción a las vías de comunicación», luego que los manifestantes protestaran sobre la Carretera Transpeninsular.
El desalojo se prolongó hasta la medianoche de ayer, con elementos policiacos desalojando con violencia a manifestantes en varios puntos de la carretera. Incluso, se enviaron decenas de unidades del Ejército Mexicano, Policía Federal, así como elementos estatales y municipales que debieron usar rutas de la sierra para acceder a delegaciones como Camalú y San Quintín por los bloqueos.
Fidel Sánchez, uno de los líderes de la Alianza de Organizaciones del Valle de San Quintín, denunció que sujetos infiltrados en el movimiento causaron disturbios que la prensa atribuyó a los manifestantes, entre ellos la quema de un comercio y los saqueos en Camalú. «Traen celulares y tecnología para grabar todo», acusó el líder jornalero, «nosotros no usamos eso, no tenemos cómo».
Con información de Reforma