México, 15 de mayo 2015 (NOTIGODÍNEZ).- Entre las incontables violaciones a todas las leyes electorales que perpetra el PRI-PVEM, los desvíos millonarios del narco hacia la campañas del PAN (incluyendo recursos públicos de la megapensión de Felipe Calderón), las carretadas de dinero de procedencia desconocida para el «Bronco», los plagios y asesinatos de candidatos, no hay duda que esta «elección» es digna del ESTADO FALLIDO que es México, secuestrado por los peores criminales del mundo.
En menos de 24 horas, dos candidatos, uno de Morena y uno del PRI, han sido asesinados a quemarropa.
El primero, Enrique Hernández Saucedo, candidato a la presidencia municipal de Yurécuaro, Michoacán, por el partido Movimiento Regeneración Nacional y otrora líder de autodefensas en esa región colindante con Jalisco, fue baleado la noche de ayer desde un vehículo en movimiento durante un acto proselitista en el municipio.
Otras tres personas que resultaron heridas en el mortal atentado fueron trasladadas al hospital de La Piedad. Hernández Saucedo falleció en sitio del ataque.
Según la dirigencia estatal del partido, el ex líder de autodefensas acababa de concluir un mitin en el centro del municipio cuando fue atacado. Desde la época del «virrey» Castillo, había estado recibiendo acoso y amenazas de muerte por su intención de continuar el movimiento de autodefensas en la región.
Más tarde, en otro punto del país, el candidato priista a noveno regidor para el municipio de Huimanguillo, Tabasco, Héctor López Cruz, fue asesinado afuera de su domicilio.
El priista recibió 16 balazos cuando regresaba a descansar luego de hacer proselitismo casa por casa. Junto a él se encontraba su hermano al momento del atentado, quien resultó gravemente herido y fue trasladado a un hospital cercano bajo resguardo policial.
De acuerdo con medios locales, los hechos ocurrieron alrededor de las 21:00 horas en la comunidad de Mecatepec, perteneciente al citado municipio tabasqueño. Los agresores esperaban a las víctimas en dos vehículos de lujo, uno de color blanco y otro gris, de las cuales descendieron para atacarlos a quemarropa cuando Cruz López arribó al domicilio acompañado de su hermano.
Tras perpetrar el homicidio, lo sicarios huyeron a bordo de las unidades. Vecinos del lugar dieron parte a las «autoridades» de lo poco que alcanzaron a registrar sobre ellos.
Con información de La Jornada y Tabasco Hoy
