México, 20 de noviembre 2015 (NOTIGODÍNEZ).- Las ratas se han vuelto cada vez más agresivas en su rapiña por el control del gran negocio que también es el deporte en México. El problema es que, como en todo lo demás, acaba siempre pagando el pueblo y en este caso los atletas mexicanos.
Debido a las eternas rivalidades y rebatiña entre las mafias intestinas del deporte mexicano –«Comisión Nacional del Deporte» (Conade), «Comité Olímpico Mexicano» (COM) y federaciones– por el control de los recursos públicos asignados, nuestro país podría quedar fuera del otro monstruoso negocio mundial que son los Juegos Olímpicos, particularmente gracias a que el asesino de Atenco y actual usurpador Enrique Peña Nieto, impuso en la Conade a otro como él, corrupto y asesino, el brutal Alfredo Castillo.
De acuerdo con El Economista. varias federaciones deportivas acusaron a la Conade de agresiones e injerencia indebida, por lo que nuestro país podría ser desafiliado del Comité Olímpico Internacional (COI) y quedarse sin representación en los próximos JJ.OO. de Río de Janeiro 2016.
En tal caso, la delegación mexicana podría competir pero con la bandera del COI –la famosa bandera blanca con los aros olímpicos– y si alguno de nuestros connacionales obtuviera medalla de oro, se escucharía también el himno de ese comité en lugar del himno nacional mexicano durante la ceremonia de premiación.
Algo como esto ocurrió con el equipo olímpico de la extinta Unión Soviética en 1992, que tras la disolución de la URSS el año anterior, se quedó sin representación formal ante el COI por lo que sus atletas tuvieron que competir como «Equipo Unificado», bajo la citada bandera olímpica, hasta que los diferentes países resultantes de la separación de Rusia pudieron afiliarse al comité.
Carlos Padilla Becerra, presidente del COM, informó que se reunió recientemente en Lausana, Suiza, con Thomas Bach, presidente del COI, a quien le entregó una carta firmada por 10 federaciones nacionales de deportes olímpicos, en la que denuncian la injerencia por parte de la Conade, a cargo de Alfredo Castillo.
Entre ellas las federaciones firmantes se encuentra la de atletismo, tiro con arco, pentatlón moderno, pesas, boxeo, voleibol, basquetbol y otras que no pertenecen al calendario olímpico.
En esa reunión también participó el priista Olegario Vázquez Raña, miembro permanente del COI y uno de los mafiosos que por mucho tiempo han parasitado el deporte en nuestro país.
La rebatiña por el dinero no es nueva y data de hace muchos años, en que federativos y sus familiares se han enriquecido a costa del estancamiento del deporte mexicano –como todos los demás rubros de la vida nacional–, sin embargo, la «crisis» se agudizó en el actual régimen usurpador.
El Economista recordó que el conflicto se originó en abril pasado, cuando Peña Nieto impuso en la Conade a su compadre asesino Alfredo Castillo, quien había salido de Michoacán después de haber aniquilado casi por completo a los movimientos de autodefensa en la entidad. Fiel a su estilo represor, autoritario y abusivo, Castillo emprendió una ofensiva contra diversas federaciones, aplicando auditorías, acusando irregularidades y hasta revocando el registro a varias de ellas.
Al menos 24 federaciones se vieron afectadas por la falta de recursos al ser desconocidas por Castillo, e incluso le ha negado los recursos al COM el cual, según Padilla Becerra, no ha recibido un solo peso del régimen usurpador desde abril de este año.
Con información de El Economista
