México, 11 de enero 2016 (NOTIGODÍNEZ).- Claro, para eso se necesitaban fuegos artificiales en televisión: ocultar el brutal desastre económico en que se encuentra nuestro país, al depender casi enteramente de los ingresos petroleros mermados más que nunca con la baja en los precios internacionales, particularmente de nuestro crudo.
El diario Reforma informó hoy que la mezcla mexicana de exportación siguió su ruta en picada, arrancando la semana con una pérdida en su valor de 6.68 por ciento respecto al precio del viernes, cerrando en un nuevo mínimo de 22.07 dólares por barril.
De esta manera, según el rotativo, nuestro crudo acumuló su sexta jornada consecutiva con pérdidas brutales, ubicándose en niveles abismales en su valor no registrados desde el 24 de septiembre de 2003.
Detalla Reforma que en lo que va del año, el precio de la mezcla mexicana no ha logrado una sola sesión con ganancias y, tras el resultado de este lunes, el precio se ubica 19.36 por ciento por debajo del precio del 31 de diciembre de 2015. Un arranque de año realmente nefasto.
La causa de esta nueva variación negativa en los precios del petróleo, particularmente del mexicano, fue atribuida ahora a las preocupaciones generadas desde la semana pasada en torno de la desaceleración de la economía china, lo que augura una menor demanda de crudo, la turbulencia que esto, junto con la devaluación del yuan, provocó en los mercados de capitales y las tensiones en Medio Oriente, según informó el diario aquí citado.
Asimismo, se espera que la producción de crudo en Irán se incorpore en el corto plazo, lo que incrementaría la oferta de este energético en un mercado con sobreoferta, abaratando aún más los prcios internacionales.
Por su parte, el WTI registró en Estados Unidos una caída de 5.28 por ciento respecto al precio del viernes y cerró en 31.41 dólares por barril. A su vez, en Londres, el Brent concluyó la sesión en 31.30 dólares, 6.71 por ciento menos que su precio del viernes. Ambos referenciales se encuentran en sus niveles mínimos de casi 12 años.
La situación de los precios internacionales del petróleo arrastra sin piedad a nuestra economía, dependiente en gran medida de los ingresos por venta de crudo. A la baja histórica en el precio de la mezcla mexicana, súmese la devaluación brutal de nuestra moneda, con el dólar cotizándose a un delirante tipo de cambio de más de 18 pesos. El desastre inminente seguido del súbito disparo inflacionario, no tendrá precedente en la historia.
Con información de Reforma
