México, 7 de abril 2016 (NOTIGODÍNEZ).- Dos de los cuatro jóvenes –hijos de prominentes empresarios de Orizaba– conocidos como «Los Porkys», que violaron a una jovencita de 15 años en 2015, habrían huído del país para evadirse de la «justicia», según reportaron diversos medios de comunicación.
De acuerdo con la agencia Proceso, tanto el diario Reforma como La Jornada retomaron informes de medios locales de Veracruz, en los que se asegura que Diego Cruz Alonso huyó hacia Madrid, España, mientras que Enrique Capitaine Marín escapó hacia Houston, Estados Unidos. Con esto, estarían evadiendo una orden de aprehensión si es que la Fiscalía General del Estado les finca responsabilidad penal –no ha sucedido– por el ataque sexual contra Daphne Fernández.
Por si fuera poco, Proceso detalló que se desconoce el paradero de los otros dos integrantes de «Los Porkys», Jorge Cotaita Cabrales y Gerardo Rodríguez Acosta, así como de un quinto implicado de nombre Felipe Capitaine –hermano gemelo de Enrique–, cuya última aparición pública ocurrió el pasado 26 de marzo, día en que fueron requeridos para una diligencia ministerial en la Fiscalía Regional de Boca del Río que lleva el caso.
Como ya se indicó, el fiscal general de Veracruz, Luis Ángel Bravo Contreras, confirmó que aún no se ha liberado orden de aprehensión contra los agresores de Daphne, en virtud de que «continúan las diligencias ministeriales y el desahogo de pruebas».
Sobre los reportes de la fuga, Bravo Contreras los calificó de «rumores» y presumió que, de ser ciertos, facilitarían la localización de los sujetos en cuestión.
“No sé si ya se fueron, pueden ser rumores. Desde que estalló el escándalo estaba el rumor de que se habían ido y el 26 hubo una diligencia y se volvieron a presentar”, señaló. «Si fuera el caso, su localización se simplificaría a partir de la ruta que tomaron en vuelos comerciales o incluso desde centrales de autobuses.»
Medios extranjeros en Internet no se callan en señalar lo evidente en este caso: gracias al poder adquisitivo de sus familiares, Enrique Capitaine Marín pudo huir de sus delitos en el momento que se le dio la gana.
“Este grupo de hombres jóvenes, conocidos como Los Porkys, son hijos de familias ricas e influyentes de México. Debido a sus lazos familiares, una ciénaga de corrupción ha plagado el caso. ¿Por qué esta preocupación afecta a nuestra comunidad?”, se lee en un artículo del portal The Woodlands Monocle, citado por Proceso.
La agencia recordó que la violación ocurrió en enero de 2015, pero los padres de la joven agredida decidieron denunciar hasta mayo siguiente. Un año después, los violadores siguen libres, impunes, y la «fiscalía» dio señales de vida sólo cuando los familiares acudieron a la prensa.
Con información de Proceso
