ÚTLIMA HORA: El cuerpo de Luis Alberto ya ha sido entregado a su madre. Las sospechas de alteración del resultado de la necropsia se mantienen.
Yadira Llaven Anzures
La Jornada
A casi 24 horas del fallecimiento del niño de Chalchihuapan, José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo, el «gobierno» del estado niega la entrega del cuerpo a sus familiares, por lo que los abogados no descartaron que se intente cambiar el dictamen de la necropsia para deslindar a las autoridades que el menor murió a causa del impacto de una bala de goma que le voló parte de la cabeza.
En ese sentido, Elia Tamayo Montes, madre del menor, está exigiendo formar parte en la realización de la necropsia de su hijo.
A esta petición se sumó la diputada federal, Roxana Luna Porquillo, quien solicitó que un especialista esté presente durante la intervención de ley para confirmar que el resultado no será cambiado.
Luna Porquillo confirmó que la familia no fue informada oficialmente de la muerte del niño, pues se enteraron a través de los medios de comunicación.
[En efecto, ayer por la noche la Secretaría de Salud Estatal emitió un comunicado ante unos cuantos medios afines al panista Rafael Moreno Valle, en el que se dio a conocer sorpresivamente el fallecimiento de José Luis Alberto Tlehuatlie Tamayo por un «paro cardio-respiratorio», justo cuando horas antes un juez había ordenado no desconectar al niño del respirador artificial que lo mantenía con vida, para dar paso a una inspección de las condiciones de su internamiento.
La «autoridad» no se molestó en informar primero a Elia Tamayo, despreciándola una vez más pese a su legítimo derecho como progenitora y familiar directo del menor afectado. Durante los 10 días que Luis Alberto estuvo internado en el Hospital General del Sur, los médicos mantuvieron oculto el parte médico y sólo decían a la madre que «se encontraba grave» sin darle más detalles.]
Con información de La Jornada de Oriente y NOTIGODÍNEZ
