Israel Rodríguez
La Jornada (Foto: Alfredo Domínguez / Archivo)
México, DF. La Unión de Transportistas del Estado de Baja California (UTEBC), perteneciente a la Alianza Nacional de Transporte Multimodal (ANTM), anunció esta mañana la próxima realización de una movilización a nivel nacional con el fin de lograr un alto urgente y definitivo al incremento en los hidrocarburos, que en su caso significa el 11 por ciento anual al costo de la tarifa en su entidad, mientras en la ciudad de México constituye 23 por ciento, lo cual los deja en total estado de indefensión económica para otorgar el servicio.
La problemática, dijo el dirigente de los transportistas de Baja California, Benjamín Garza Fernández, afecta al gremio que presta el servicio de transporte público a los ciudadanos del país que constituyen los sectores más importantes y necesitados de la población como son el obrero, el estudiante y el ama de casa.
Para nosotros, añadió Garza Fernández, es muy importante destacar que no es con el incremento de tarifas como vamos a solucionar el problema, porque es un elemento político; los gobiernos tienen en sus manos la decisión y no la han querido soltar en ninguno de los congresos locales para que las tarifas sean indexadas a la inflación nacional, el incremento de los costos y sensibilizada al poder adquisitivo de los usuarios.
Asimismo, dijo, los transportistas consideramos injusto que sea la población, tras el golpe económico asestado este año a todos los mexicanos, quienes paguen los probables incrementos al transporte porque en nuestro país son las clases denominadas dentro de los segmentos D y E, a quienes damos el servicio; además de que cualquier incremento a las tarifas, mientras no se pare la carrera alcista en los precios de los combustibles, será sólo un paliativo que en poco apoya al gremio del transporte público de pasajeros.
Benjamín Garza Fernández, presidente de la UTEBC, agregó que ante la situación anterior y pese a que quienes dirigen el sector desean un diálogo razonado y constructivo con los tres niveles de gobierno, también tienen la presión de sus agremiados, quienes en los distintos estados desean realizar acciones más fuertes, porque sólo así han logrado que la autoridad dé solución a sus problemas.
Puso como ejemplo la movilización de 2006, cuando el sector transporte cerró la Garita de Mexicali por 22 horas y también las instalaciones de Pemex por más de 50 horas. “Sólo así conseguimos que durante tres años se contuviera el precio de la gasolina Magna en 7.40 pesos y la Premium en 7.95”.
Por ese motivo, ante la experiencia pasada sus agremiados desean tener una respuesta pronta del gobierno federal para poner un alto de manera urgente y definitiva a los incrementos a los combustibles, porque de lo contrario, “nos veríamos obligados a respaldar su exigencia y tomaríamos acciones de fuerza en el estado y en los estados que se nos unan”.
