José Antonio Román
La Jornada
México, DF. Las principales denuncias que enfrenta la dirigencia nacional del PRI son de orden laboral, ya sea por despidos injustificados o “irregularidades” en la relación con sus trabajadores.
De acuerdo con datos de la Secretaría Jurídica del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, en orden descendente le siguen los juicios de carácter mercantil, y otros más de procedimientos intrapartidarios y juicios electorales contra sus propios militantes.
Tan sólo en los últimos dos años, la dirigencia nacional ha clasificado como temporalmente reservado un total de 77 expedientes, 67 de ellos de carácter laboral, tres de índole mercantil, y el resto del orden electoral. Estos casos sólo corresponden a la dirigencia nacional, pues los Comités Directivo Estatales tienen sus propias cifras y problemática.
Respecto a la clasificación de reserva temporal de dichos expedientes, el Comité de Información del Instituto Nacional Electoral (INE) ha hecho algunas observaciones y llamado la atención al PRI, debido a que la relación presentada al segundo semestre del 2014, el partido mantiene indebidamente información clasificada, cuando los casos ya causaron ejecutoria y son cosa juzgada.
