Por Emmanuel Ameth
(@1ameth1)
Pese a la pobreza que impera en el municipio de Tlahuiltepa, Hidalgo, su actual alcalde Reginaldo González Viveros, se despacha con la cuchara grande, causando molestia entre los ciudadanos quienes incluso cerraron el acceso al ayuntamiento en julio pasado.
Familiares en la nómina municipal
Uno de los principales beneficiados es el mismo Secretario Municipal, quien obedece al nombre de Santiago Moreno Ramírez. El también profesor es esposo de María Cruz Hernández, hermana de la esposa del alcalde.
Y es que pese a percibir un sueldo de 22 mil pesos mensuales –nada despreciables para un municipio de las carencias de Tlahultepa-, Moreno Ramírez se encuentra asignado como supervisor escolar de la zona 147 Acapa en el sector 038, donde también goza de un sueldo superior a los 20 mil pesos mensuales, toda vez que el referido ‘no cuenta con permiso ni licencia’ emitido por las Secretaría de Educación Pública, según consta la solicitud de transparencia foliada con el número CE2817.
Además, para justificar su actividad como supervisor, la misma presidencia paga a un auxiliar de relativo bajo perfil para que cumpla las funciones que como supervisor, supuestamente realiza.
Pero el edil Tlahiltepo también creó la plaza de ‘Encargado de Informática’ en el ayuntamiento, puesto en el que designó a Marco Antonio Ayala Domínguez, quien es su cuñado al estar casado con María Ventura González Viveros.
Gustavo Díaz González, hijo de Lidia González Viveros y sobrino del alcalde también se habría visto beneficiado por el nepotismo que impera en el ayuntamiento, mismo al que le fue asignada la responsabilidad de la supervisión de obras públicas.
Incluso, para realizar actividades de chofer, fue contratado Marino Cruz Hernández, quien cobra en el ayuntamiento como Auxiliar de Obras y al ser cuñado de su esposa.
Tlahuiltepa, entre la pobreza y el olvido
¿Por qué es tan escandaloso para los habitantes de la región que se realice nepotismo en el ayuntamiento? Por la pobreza y falta de oportunidades en las que se vive en la demarcación.
Según el Directorio Nacional de Unidades Económicas (Denue) de Inegi, tan sólo existen 65 unidades económicas de la iniciativa privada que laboran en la región, cuya actividad no alcanza a emplear ni a 100 personas (a diferencia del sector público, donde existen 230 plazas ocupadas). Por ello, a pesar del crecimiento demográfico que ha ocurrido en el país, Tlahuiltepa goza de 8% menos población de la que tenía en 1995.
Del total de la población, solamente el 0.8% de personas no es pobre y no es vulnerable (lo cual no quiere decir que sean ‘ricos’ sino que simplemente no padecen carencias básicas), por lo que el 77% de las personas apenas puede subsistir y un 44% del total vive al día con un ingreso inferior a la línea de bienestar mínimo, por lo que observan una desnutrición crónica…
Por su parte, Reginaldo González Viveros se dedica al ramo mueblero, teniendo sucursales en la delegación Cuauhtémoc de la CDMX y en la ciudad de Pachuca (donde perfectamente podría emplear a sus familiares), siendo también acusado de ganar las elecciones, vía Panal, derivado de lesiones y amenazas de grupos de choque.
