México, 30 de octubre 2017 (NOTIGODÍNEZ).- La politóloga Denise Dresser Guerra, conocida por su desprecio a los partidos políticos y su intenso activismo en favor del voto nulo durante las elecciones intermedias, aceptó colaborar con el denominado «Frente Amplio Ciudadano» integrado por los partidos «Acción Nacional» (PAN), de la Revolución Democrática (PRD), «Movimiento Ciudadano» (MC) y satélites priistas, rumbo a la elección del próximo año.
De acuerdo con el diario Reforma, Dresser y otros siete ciudadanos que se autonombran «representantes de la sociedad civil», firmaron un posicionamiento en el que se declaran «listos para participar de manera formal en la toma de decisiones del Frente, tanto en materia de proyecto como en el método para la definición de candidaturas».
«Los abajo firmantes, a título individual, aceptamos su invitación para definir un esquema que permita a la sociedad civil sumarse a sus equipos de trabajo en la definición del programa de Gobierno, la estrategia electoral y la vocería del Frente.
«Así como para buscar el mecanismo para seleccionar a las y los mejores perfiles para las candidaturas, a los distintos cargos de elección popular», se lee en el texto citado por Reforma.
Entre los firmantes se encuentra la jurista Ana Laura Magaloni, así como Juan Francisco Torres Landa, de México Unido contra la Delincuencia, y Carlos Cruz, de Cauce Ciudadano, quien será el enlace con los partidos políticos.
Denise Dresser, activa promotora del voto nulo en los periodos de elección de diputados, ha sido cuestionada por su rol ideológico en la despolitización de la sociedad. Desde las redes sociales -donde tiene mucha influencia- y los espacios en medios para los que colabora, se dedica a implantar la idea de que «todos los políticos son iguales» y que el sistema de partidos es obsoleto y un lastre para la verdadera democracia.
#anularesvotar #AnulaNoTeConformes con mis hijos … pic.twitter.com/7mDTrNlubW
— Denise Dresser (@DeniseDresserG) June 7, 2015
Sin embargo, la politóloga no rechaza las invitaciones de los mismos partidos a los que denuesta para impartir conferencias y charlas, cobrando cantidades exorbitantes de dinero público. También ha coqueteado varias veces con el PAN y el PRD cuando se le ha ofrecido alguna candidatura o, como en este caso, no duda en participar en las iniciativas de esos partidos para simular «vinculación con la ciudadanía».
Frente a su ambivalencia y actitud incongruente, se le ha acusado de ser una «infiltrada» del propio sistema político para operar en favor de los grupos que actualmente usurpan las instituciones nacionales, ya que, según sus críticos, el llamado a anular el voto y la consigna de «todos son iguales» -comparando indiscriminadamente a usurpadores, corruptos y asesinos con ciudadanos que sí buscan el cambio desde una trinchera partidaria- sólo beneficia al priismo más nefasto y debilita el apoyo a la «oposición».
Con información de Reforma
