CLAUDIO VARGAS
La Jornada
La directora de Atención a Grupos Étnicos del gobierno municipal, Magdalena Valtierra García, aseveró que son 50 mil los indígenas que abandonaron sus comunidades por la pobreza y se encuentran radicando en este municipio algunos de los cuales viven en predios localizados en zonas de alto riesgo en colonias de las orillas y otros hacinados en cuartos pequeños donde viven dos o tres familias.
La funcionaria explicó que en este destino de playa se encuentran indígenas amuzgos, mixtecos, tlapanecos, náhuatls, algunos de los cuales ya están de manera permanente en varios predios que con mucho sacrificio han comprado en colonias de la periferia pero en zonas consideradas de alto riesgo.
“La forma en la que viven no siempre es muy cómoda, sabemos que de esos 50 mil indígenas algunos prefirieron rentar en zonas céntricas y entre varias familias se cooperan para pagar el alquiler de pequeños cuartos donde viven hacinados, porque lo que ganan trabajando en la ciudad no les alcanza para más”, dijo.
“Estamos amontonados y comiendo puro frijol con arroz y chilito, pero contentos porque nos queda cerca el lugar para vender los productos de fruta de temporada y algunas artesanías que hacemos a mano y otros a la venta de frutas o raspados”, explicó uno de los amuzgos.
A los mixtecos, tlapanecos, náhuatls y amuzgos se le han sumado los llamados afromestizos que provienen de la región de la Costa Chica de Guerrero y que han encontrado en Acapulco una forma de subsistencia y de aprender nuevas cosas, añadió.
