Fernando Inés Carmona
La Jornada
Tequila, Ver.- Habitantes de este municipio exigen al Congreso del Estado iniciar una auditoría técnica y financiera al ayuntamiento para que corroboren las irregularidades con las que trabaja; pese a ser uno de los 15 municipios más pobres del país, los funcionarios “dobletean salarios”; en la mañana “trabajan en la docencia y por la tardes y por horas lo hacen en el palacio”.
De acuerdo a Juan Ernesto Tzopitl, representante comunal de la congregación de El Campanario, el vacío de poder en el ayuntamiento es notable, “por un lado tenemos a un presidente ineficiente y por otro a funcionarios cuya características principal son las constantes ausencias a su fuente de empleo”.
Entre los cargos de confianza en el palacio municipal, acusa, “hay quienes cobran doble salario: en el ayuntamiento así como en otros lados”. El ejemplo más claro está en el secretario del ayuntamiento, Pedro Gerardo Apale Palacios, quien pese al encargo continúa en sus labores como trabajador de la educación.
El funcionario se ausenta por las mañanas y hasta el mediodía, “se desempeña como director de la escuela secundaria técnica número 162 en la comunidad de Pixcuautla, en el municipio de Tlaquilpa”. Basta acudir al palacio municipal de lunes a viernes por las mañanas para constatar la ausencia del secretario del ayuntamiento, señala.
El alcalde y el cabildo autorizaron su doble trabajo, “el secretario obtiene doble salario, uno como docente y otro más como secretario, “quien sólo llega un par de horas al palacio municipal a firmar constancias, cartas de residencia y otras documentaciones. A eso se reduce su trabajo”.
Son situaciones que contrastan con la pobreza en la que viven la mayoría de las familias de esta zona de la sierra de Zongolica”.
Por eso piden que el Congreso del Estado investigue al ayuntamiento. “Sería interesante que una comisión de diputados viniera al palacio municipal a investigar cómo se trabaja en el palacio municipal. Las carencias que se tienen como municipio son bastante graves. Hay comunidades en donde la gente literalmente no tiene para comer. No hay caminos transitables. Hay quienes habitan en casas con techos de plásticos, pero también tenemos funcionarios municipales que en el ayuntamiento resolvieron su vida”, acusa.