México, 19 de septiembre 2016 (NOTIGODÍNEZ).- Tanto el historial de estudios como el acta de nacimiento del asesino de Atenco y actual usurpador, Enrique Peña Nieto, no existen oficialmente.
De acuerdo con el portal Sinembargo, el pleno del Instituto Nacional de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) declaró «inexistente» el acta de nacimiento del sujeto que ocupa ilegalmente Los Pinos, luego de que un ciudadano solicitara en 2014 el documento a ese órgano desconcentrado.
Según el citado medio, la petición fue inicialmente turnada a la Jefatura de la Oficina de la Presidencia, ocupada en aquel entonces por Aurelio Nuño Mayer alias «Ñoño». De ahí, la orden para localizar y presentar la copia del documento solicitado pasó a varias instancias al interior de «presidencia» usurpada.
Sinembargo detalló que tanto la Secretaría Particular del Presidente, a cargo de Erwin Manuel Lino Zárate; la Coordinación de Comunicación Social cuyo responsable era David López; así como la Coordinación de Asesores del Presidente, en poder de Francisco Guzmán, informaron que no hallaron el acta luego de una «búsqueda exhaustiva».
Peor aún, la Dirección de Recursos Humanos a cargo de Alfonso Brieño Sánchez, quien tiene un sueldo bruto de 171 mil 901 pesos con 35 centavos, aseguró no haber encontrado el acta de nacimiento de su jefe Peña Nieto, pese que su obligación es contar con el expediente personal de todos y cada uno los empleados del régimen, incluyendo el usurpador mismo.
Por tanto, la jefatura de «presidencia» respondió al INAI que la copia de ese importante documento «no existe», lo cual fue avalado por el instituto.
Aunque en primera instancia podría suponerse que, en efecto, el documento está extraviado o de plano nunca existió, en realidad la declaración de «información inexistente» forma parte de tres criterios utilizados por la función pública usurpada por criminales, para ocultar datos a la ciudadanía. Los otros dos criterios son «información reservada» e «información confidencial».
En el mismo caso de «inexistente» se encuentra el historial académico del asesino de Atenco, quien presume una licenciatura en Derecho (con tesis plagiada) por la Universidad Panamericana, y una maestría en administración por el Tecnológico de Monterrey.
El hecho de que, tanto el historial de estudios como el acta de nacimiento de Peña, hayan sido declarados como inexistentes, no implica necesariamente que esos documentos no existan. Por el contrario, lo más probable es que estén siendo ocultados para que la ciudadanía no pueda conocer la información que en ellos se reporta.
La biografía «oficial» de Peña Nieto indica que el sujeto nació el 20 de julio de 1966, sin especificar el lugar de semejante tragedia para el país. De acuerdo con la opinión más admitida, Peña habría sido malparido en Atlacomulco, Estado de México. Sin embargo, no hay manera de confirmar esta información.
Por cuanto al registro académico del asesino de Atenco, tampoco hay forma de conocer las calificaciones que obtuvo en los diferentes niveles de escolaridad que cursó —si es que realmente los cursó—, es decir, es imposible hasta ahora conocer el rendimiento y capacidad académica del sujeto, pese a que, en teoría, debería ser información pública que deberíamos haber conocido mucho antes de que usurpara la presidencia.
Todo esto tiene sentido en un régimen usurpador, criminal e ilegítimo de suyo. ¿Por qué habrían de rendir cuentas a la ciudadanía los delincuentes que se roban el poder en este país?
Con información de Sinembargo
