Yadira Llaven Anzures
La Jornada
Carente de señaléticas y semáforos, que además perjudican el paso al peatón y al ciclista, abrió el Distribuidor Vial de Cholula sus dos carriles a la circulación automovilista, que en su primer día de operatividad causó severo “cuello de botella” en la calle 12 Oriente-Poniente, a la altura de la antigua vía del ferrocarril, como pronosticaron urbanistas.
La situación ha generado una inconformidad generalizada en los vecinos que habitan en barrios y colonias alrededor del puente “atarantado”, como han bautizado al distribuidor con tirantes de acero, porque no tienen razón de ser.
Acusaron que la obra pone en riesgo la vida de ciclistas y de quienes caminan por la zona, además externaron que el distribuidor separó literalmente a los barrios del templo de la virgen de los Remedios, afectando con ello el culto y la tradicional baja de la imagen religiosa.
A esto se suma que en la entrada principal a San Andrés y San Pedro Cholula se prescindió del semáforo de la calle 12 Norte, lo cual genera en “horas pico” filas interminables de automovilistas que tienen que dar vuelta hasta la calle 8 Norte para poder salir en dirección a la ciudad de Puebla.
Por tal razón, al lugar fueron destinados por lo menos cinco agentes de tránsito para agilizar el tráfico vehicular, debido a que de un día para otro y sin previo aviso bloquearon totalmente la calle 12 Norte.
Una barrera de concreto prefabricado fue instalado sobre la citada calle, a fin de impedir la circulación de vehículos del lado norte a sur, con el objetivo de agilizar el tránsito de los automóviles que hacen uso del distribuidor.
Es decir, los peatones, ciclistas y automovilistas no pueden atravesar esta importante vialidad que comunica al sitio arqueológico con la inspectoría de Lázaro Cárdenas y los barrios de Santiago Mixquitla.
La polémica obra fue inaugurada casi a escondidas por el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, el secretario de Infraestructura, José Cabalán Macari, así como por los alcaldes de San Andrés y San Pedro Cholula, Leoncio Paisano y José Juan Espinosa, casi al anochecer de este domingo.
Lo anterior, a fin de evitar protestas por parte de pobladores de la región que se opusieron a la construcción del puente por innecesario.