Ahora hospitalizan al autor intelectual de la matanza de Acteal de 1997, Emilio Chuayffet

México, 6 de agosto 2015 (NOTIGODÍNEZ).- Ya son varios los «enfermitos» del actual régimen usurpador.

El priista Emilio Chuayffet Chemor, actual usurpador de la «Secretaría de Educación Pública» y autor intelectual de la matanza de indígenas de Acteal en 1997, fue hospitalizado hace algunas horas presuntamente por un cuadro de deshidratación.

El diario La Jornada informó que el sujeto todavía se encuentra internado en un hospital del poniente de la ciudad de México. Durante la noche de este martes, circularon rumores acerca de que el estado de salud de este asesino era grave; sin embargo, integrantes de su «equipo» consultados por el diario sólo confirmaron que el individuo está en el nosocomio, sin detallar la magnitud del asunto.

Más tarde, El Universal publicó que la causa del internamiento fue un cuadro de deshidratación y que el sujeto se encuentra «estable».

Chuayffet no sería el primer «funcionario» del actual régimen usurpador con problemas de salud que lo mandan hasta el hospital.

La noche del pasado sábado 23 de mayo de este año, el priista Sebastián Lerdo de Tejada, entonces director del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE), falleció de un infarto a la edad de 48 años.

Lerdo de Tejada ingresó al hospital Adolfo López Mateos de la Ciudad de México, trasladado de urgencia por una ambulancia. Sin embargo, desde el viaje los paramédicos habían estado tratando de reanimarlo sin conseguirlo. Cuando llegó al nosocomio, se realizaron maniobras de resucitación por espacio de 30 minutos, pero el sujeto ya había fallecido.

Otro individuo que también falleció en el actual régimen fue el panista Juan Molinar Horcasitas. Éste no formaba parte del equipo usurpador actual, pero fue director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) durante el espuriato de Felipe Calderón, responsable desde ese puesto de la muerte de 49 niños en un incendio en la Guardería ABC ubicada en Sinaloa.

Y si de enfermos se trata, el propio Enrique Peña Nieto ha sido intervenido quirúrgicamente varias veces en lo que va de su régimen espurio. Su pinta es la de una persona enferma y cada vez más disminuida.

Pero el problema no es que estos criminales estén enfermos. El problema es que el pueblo les pague sus costosos tratamientos médicos, mientras ellos se dedican a privatizar los pocos servicios públicos de salud que quedan, como parte de la agenda neoliberal de exterminio social y negocio a costa de la salud de la población. Esos tipos ni siquiera deberían estar donde están en primer lugar, pero el colmo de la aberración es que el pueblo los sigue manteniendo.

Con información de La Jornada

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