Redacción Proceso
MÉXICO, D.F. (apro).- Petróleos Mexicanos (Pemex) registró una pérdida neta de 52 mil 400 millones de pesos en el segundo trimestre del año por mayores costos de ventas, deterioro de activos y una pesada carga fiscal.
La cifra es 15.6% más alta en relación con la pérdida de 45 mil 300 millones de pesos que la paraestatal tuvo en el mismo periodo del año pasado.
De acuerdo con información presentada a la Bolsa Mexicana de Valores, sólo en el primer semestre del año Pemex acumula una pérdida de 88 mil 248 millones de pesos.
A pesar de una reducción en la plataforma de producción de crudo y su precio, la carga fiscal en relación con el rendimiento antes de impuestos fue de 132.1%, en tanto que en igual periodo del año pasado fue el equivalente a 130.8%.
De esta manera, en el segundo trimestre de este año Pemex pagó 218 mil 202 millones de pesos y el primer semestre entregó al fisco 428 mil 818 millones de pesos.
Los informes oficiales precisan que la producción de petróleo en el segundo trimestre promedió 2 millones 468 mil barriles diarios, volumen 1.9% inferior al mismo periodo del año anterior.
Durante el primer semestre de 2014, los pasivos laborales o beneficios a empleados ascendieron a 1 billón 153 mil 301 millones de pesos, lo que significó un aumento de 10% respecto del mismo periodo del año pasado, cuando se ubicaron en 1 billón 195 mil 822 millones.
La deuda total registró un aumento de 10%, equivalentes a 83 mil 900 millones de pesos, con lo que los pasivos totales de Pemex sumaron 2 billones 320 mil 117 millones de pesos.
No obstante, las ventas totales de la paraestatal subieron 4% interanual a 409 mil 070 millones de pesos por un aumento de 27.5% en las ventas de gas natural en México, debido al incremento de 14.1% en el precio; un aumento de 7.2% en las ventas locales de gasolina y diesel, y en las exportaciones de 4.2%.
El costo de ventas subió 13.2% por mayores gastos de operación, de producción y de adquisición de inventarios.
Según la empresa, la pérdida neta se debió a los mayores costos de ventas, al reconocimiento del deterioro del activo Burgos –un proyecto de producción de gas en el norte de México– y a una carga fiscal superior al beneficio antes de impuestos y derechos.
