- El Estado no debe acallar la protesta pues entonces ¿de qué lado está?, pregunta
- El sacerdote dice que si el gobernador respeta la lucha social, debe demostrarlo con hechos
MARGENA DE LA O
La Jornada
Chilpancingo, 7 de agosto. El sacerdote Alejandro Solalinde Guerra, defensor de los derechos humanos de los migrantes centroamericanos y sudamericanos, llamó al «gobernador» Ángel Aguirre Rivero a que defienda al pueblo si realmente es un hombre de izquierda, “…porque, entonces, ¿de qué lado está?”.
El sacerdote, quien es coordinador de la Pastoral de Movilidad Humana Pacífico Sur del Episcopado Mexicano, y director del albergue Hermanos en el Camino, ubicado en Ixtepec, Oaxaca, en donde se da alimentación, atención sicológica, asesoría a migrantes centroamericanos y sudamericanos, en su travesía por México para llegar a Estados Unidos, estuvo en Chilpancingo como invitado al foro Los procesos migratorios en Guerrero, convocado por el Centro de Derechos Humanos de la Montaña, Tlachinollan; la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), y la Secretaría de los Migrantes y Asuntos Internacionales (Semai).
“El llamado que le haría al ‘gobierno’ de Guerrero, si de verdad se dice de izquierda, si de verdad está comprometido con su pueblo y sirve a su pueblo, tiene que luchar con justicia. Como Estado no puede ponerse en contra de la protesta social y en contra de la organización para reivindicar causas de la justicia del pueblo, no se puede, tiene que apoyarlo, porque, entonces, de qué lado está”, comentó en entrevista, después de participar en el foro.
Dijo que el llamado para Aguirre Rivero era a “que no haya presos de conciencia, no haya presos políticos; si el «gobierno» está por causas sociales, tiene que demostrar de que lado está con hechos, no con discursos”.
Aguirre Rivero, su estructura, su «gobierno», lleva 14 dirigentes sociales detenidos, todos asociados a miembros de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (Crac-PC). Esa cifra incluye al líder del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la presa La Parota (Cecop), Marco Antonio Suástegui.
En el actual «gobierno» de Aguirre Rivero también 13 dirigentes sociales fueron asesinados, aquí algunos: los normalistas Gabriel Echeverría de Jesús y Jorge Alexis Herrera Pino; Rocío Mesino Mesino, Luis Olivares, Raymundo Velázquez, Arturo Hernández Cardona, dijo.
Consideró que lo ideal sería que los gobiernos canalizaran la protesta social, deben canalizarla, pero, “el sistema actual es muy bueno para imponer desde arriba, vertical de arriba a abajo, no hay una etapa de México distinta”. Por ejemplo, los diputados, mencionó, saben llevar esa ruta de arriba a abajo.
Contempló en su panorama un estallido social, porque los tres poderes no han entendido la “estructura de escuchar al pueblo”. Los tres poderes, agregó, deben generar una estructura distinta y después obedecer al pueblo.
La migración desnudó a todos
El sacerdote ha dedicado los últimos años a los indocumentados centroamericanos y sudamericanos; a defenderlos de los delitos en México de grupos de poder. Solalinde tiene una definición del papel actual de la migración: “La migración está desnudando, encuerando, a las instituciones, a los gobiernos, a todos, y nos está diciendo quién es quién”.
La definición salió a partir de un pregunta que respondió, en el sentido de que, de pronto en la actualidad parece que a todos les importa el tema de los migrantes de más abajo del continente en su camino a Estados Unidos.
Dijo que la migración es un reproche constante, para saber la clase de humanidad que existe; los migrantes, “están de moda porque no se pueden esconder, y me da risa con el gobierno de México: Miguel Ángel Osorio (secretario de Gobernación) quiere desvisibilizarnos bajándolos del tren (La Bestia), porque para él la responsabilidades es menor, la presión social es menor, pero el problema no se va a acabar”.
También de la actuación del gobierno de Estados Unidos, por ejemplo, recordó que 60 mil niños migrantes que tienen registrados, dijo que primero los enjaularon, y ahora pretenden “deshacerse de ellos para no quedar mal con la comunidad internacional”.
Encabeza Guerrero las cifras de migración
Chilpancingo, 7 de agosto. Guerrero es el estado de la República que más jornaleras y jornaleros agrícolas expulsa al interior del país, aproximadamente 40 mil al año y de estos, 42 por ciento son menores de 15 años.
La responsable de asuntos migrantes del Centro de Derechos Humanos Tlachinollan, Margarita Nemecio Nemecio, informó que los migrantes desempeñan jornadas de trabajo de más de 10 horas con un sueldo de no más de 60 pesos al día.
Este estado expulsa mano de obra barata a 17 entidades federativas y entre el 2006 y 2014, se han documentado la migración de más de 60 mil personas, provenientes de 362 comunidades indígenas de la región de La Montaña, sin contabilizar las demás regiones del estado.
Entre septiembre de 2013 y enero de 2014, se registró la salida de 9 mil 300 personas, de ellas 53 por ciento fueron hombres y 47 por ciento mujeres.
De acuerdo a la información que tiene registrada Tlachinollan, el 73 por ciento de la población migrante tuvo como destino los campos agrícolas de Sinaloa.
