Porque eso es el PRI: una bola de sicarios y criminales a los que el pueblo idiota mantiene.
Guillermina Trejo
Reforma
Cd. de México (08 octubre 2014).- En sus propias narices, y en menos de 48 horas, en dos bases de Policías Municipales en el Estado de México fueron robadas 39 armas.
Primero fue Huixquilucan, donde la madrugada del domingo un comando armado ingresó al módulo de los motopatrulleros, ubicado en la cabecera municipal, y los despojó de 23 pistolas que guardaban en anaqueles.
El segundo golpe fue en la Comisaría de Tlalnepantla, a un costado del Palacio Municipal, de donde fueron hurtadas 16 armas cortas, presuntamente en la madrugada del lunes.
Por estos hechos, la Procuraduría ya investiga a un comandante y a dos jefes de turno.
Óscar Ignacio Trejo, Comisario de Seguridad en Tlalnepantla, explicó que las pistolas habían sido resguardadas en una oficina de la corporación que está en obra, cuando debieron haberse depositado en la sede policial del Ayuntamiento.
«A las 8:30 de la mañana recibo el reporte (que) la jefa de servicio del Grupo Metropolitano por la noche del día domingo dejó 16 armas guardadas en su oficina, y que a las 7:00 de la mañana, cuando llega a su turno, se percata de que no estaban» explicó Trejo.
El funcionario refirió que en el lugar no hubo violación de cerraduras.
En tanto, la jefa de servicios del Grupo Metropolitano de la Policía municipal y dos jefes de turno de la corporación fueron llamados a declarar ante el Ministerio Público por el robo de 16 armas de la Comisaría de Seguridad Ciudadana.
De acuerdo con autoridades, entre las 22:00 horas del domingo y las 7:00 horas del lunes, 11 armas marca Glock y 5 Sig Sauer, calibre 9 milímetros pertenecientes a esta agrupación, fueron sustraídas de una oficina del edificio que albergará a la Policía municipal, el cuál aún esta en construcción.
El Comisario Óscar Ignacio Trejo González manifestó que dicha oficina pertenece a Marina Cuéllar, jefa de servicios del Grupo Metropolitano.
Además, dijo que ese no era el lugar para guardar las armas, ya que éstas deben ser depositadas en la armería.
«Se avanza el subdirector operativo en compañía de la jefa de servicios junto con los dos jefes de turno para dar parte de manera inmediata al Ministerio Público (…) para deslindar si es que existe alguna responsabilidad», refirió el Comisario.
«Las armas las tiene el Municipio debidamente resguardadas en una armería especial para ello, por eso estamos verificando qué responsabilidad se puede tener por parte de estas personas que no las colocaron donde debiese ser».
Además de esos tres elementos, 20 oficiales acudieron de manera voluntaria a rendir su declaración ante el Ministerio Público.
Hasta el momento no se sabe si las armas fueron trasladadas hasta la oficina o si los oficiales se desarmaron ahí para guardar las pistolas.
Según el Comisario, eso se podrá determinar una vez que finalicen las declaraciones de los oficiales.
«El único comentario fue que se las sustrajeron, sí la pregunta fue ‘¿por qué no las metiste?’ es omisión de parte de ella (la jefa)», agregó.
Como parte de la investigación, también se analizarán los videos captados por las cámaras de videovigilancia ubicadas en la Avenida Vallarta, calle donde se ubica el nuevo edificio de la Comisaría, así como el Palacio Municipal.
Guardaba Huixquilucan armas en cuartito
La base del agrupamiento de motopatrullas de la Policía de Huixquilucan, de donde un comando robó 23 armas, tiene mínima seguridad.
El pequeño cuarto se localiza en una construcción de aproximadamente 60 metros cuadrados, que se comparte con Bomberos del Municipio.
Para el resguardo de las armas hay un anaquel de madera, con una cerradura común, en una oficina cuyas paredes son de tablarroca y no llegan al techo del edificio.
En el lugar también hay otro espacio con lockers en mal estado y un área despejada donde se guardan las motocicletas.
«Es un seguro sencillo lo que tiene la puerta (principal), si la empujas se abre, además aunque tengamos cerrado luego salen los bomberos y dejan abierto», explicó uno de los oficiales.
Debido a la vulnerabilidad del inmueble, los motopatrulleros hacen guardias de las 17:00 a las 7:00 horas para resguardar sus equipos.
Los policías Iván Guerrero Anaya, César Alejandro Suárez Flores y Eduardo Felipe Servín Guerrero, quienes fueron amagados durante el atraco, ocurrido en la madrugada del domingo, confiaron en que las autoridades refuercen las seguridad en el inmueble.
«Esperamos que salga algo bueno de esto y que tengamos mejor seguridad para todos los elementos», comentó Servín Guerrero.
Hace ocho años, la sede del agrupamiento fue cambiada de la central en Pirules, en Interlomas, a ese sitio ubicado a un costado del Jardín de la Cultura, en cabecera municipal.
Desde entonces, refirieron los agentes, está en esas condiciones.