Patricia Méndez
E-Consulta
Aproximadamente cinco de cada 10 internos en los penales de Puebla se encuentran presos bajo la figura de prisión preventiva, es decir, que fueron aprendidos por la autoridad judicial mientras se realiza una investigación sobre su culpabilidad en algún delito, pues esta no cuenta con los elementos suficientes para sentenciarlos.
Así lo advierte el informe “Alerta Nacional sobre el uso y abuso de la prisión preventiva” que elaboró la asociación civil Asistencia Legal por los Derechos Humanos (ASILEGAL) y que fue publicado en julio pasado.
El reporte estimó que a nivel nacional el 43.09 por ciento de las personas privadas de su libertad permanecen en prisión preventiva, mientras que Puebla llega al 48 por ciento y se encuentra entre los 11 estados que tienen entre el 40 y el 50 por ciento de su población carcelaria en esa situación.
Según el documento la población reclusa de la entidad asciende a 9 mil 486 personas, de las cuales 4 mil 545 fueron aprendidas bajo la medida cautelar de prisión preventiva.
Pega sobrepoblación a cárceles poblanas
El informe da cuenta de que Puebla cuenta con 22 centros penitenciarios, con una capacidad para 6 mil 12 personas, lo que implica una sobrepoblación del 57.7 por ciento equivalente a 3 mil 474 reclusos.
De hecho, cinco de los 22 reclusorios de la entidad poblana tienen los peores niveles de hacinamiento a nivel nacional, entre los que destacan la cárcel distrital de Tepeaca, donde conviven 282 internos en un espacio diseñado para 46, el Centro de Reinserción Social (Cereso) de San Pedro Cholula que alberga a 575 personas en un espacio destinado para 147.
Asimismo, se indica que el 48 por ciento de las personas privadas de su libertad se encuentran en proceso por delitos del fuero común y el 42 por ciento por ilícitos del orden federal.
Problema se replica a nivel nacional
A nivel nacional en 14 estados más del 50 por ciento de las personas privadas de la libertad permanecen en esta situación, tales como Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Nayarit, Jalisco, Colima, Aguascalientes, Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Tlaxcala, Tabasco y Quintana Roo, que retienen a más de la mitad de las personas privadas de la libertad bajo prisión preventiva.
El uso de la prisión preventiva es una medida que atenta contra el Principio de Presunción de Inocencia, pues en su artículo 20 la Constitución establece que el plazo para permanecer en prisión preventiva no debe ser mayor a dos años. Sin embargo, en estados como Oaxaca, Guerrero y Chiapas las personas permanecen en prisión preventiva por más de diez años. Fueron los casos de Pedro Gatica, Zenaida Pastrana, Sebastián, Marcial y Leobardo Zúñiga.
