Agencias
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Martínez de la Torre, Ver.- El caso del niño de ocho años a quien su madre dejó encadenado en una habitación del fraccionamiento El Roble para irse de paseo con su pareja se mantiene abierto y ahora representantes de distintas organizaciones exigen a las autoridades que se aplique todo el peso de la Ley para quienes resulten responsables, y que no dejen que este hecho sea uno más de la lista de los que han quedado impunes.
Alejandro Tapia González, presidente de la Asociación Mujeres y Hombres y por una Vida Mejor, consideró lamentable que a casi una semana de que el menor fuera rescatado de su “infierno”, la madre Dania García Oviedo y su pareja, Ana María Guittins Fuentes, sigan libres y que las autoridades encargadas del caso continúen buscando pruebas para ejercer acción penal en su contra.
“Estas mujeres deben ser castigadas con todo el peso de la Ley por cada uno de los delitos que hayan cometido; las pruebas son más que claras y están a la vista de todos. La autoridad debe de actuar de inmediato y ponerles un castigo ejemplar a ellas y a otras personas que han sido señaladas por casos similares aquí en Martínez de la Torre y en otros municipios del estado, de lo contrario el maltrato infantil seguirá aumentando”, agregó.
Por su parte, la señora Aurora López Pérez, representante estatal de la Fundación Construyendo Unidos un México con Futuro, se pronunció a favor del castigo para las dos mujeres que atentaron contra la integridad física del menor y al mismo tiempo exigió que las autoridades ministeriales que brinden resultados inmediatos, pues de lo contrario “todo quedará un simple escándalo”.
“Creo que estos casos no deben quedar impunes y que la Ley se debe imponer ante todo, aquí las pruebas que son más que suficientes y la autoridad ya no tiene que buscar mucho, el menor ya confesó el maltrato y la policía, así como las dependencias que participaron en el rescate, fueron testigos que el niño estaba encadenado, encerrado en una habitación y en un estado inhumano”.
