México, 30 de junio 2016 (NOTIGODÍNEZ).- En medio del conflicto magisterial y la herida abierta por la matanza de Nochixtlán, el régimen usurpador avanza a pasos agigantados en la privatización de todos los sectores públicos nacionales, entre ellos, el de la Salud.
De acuerdo con el portal Revolución 3.0, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) entregará la administración de su nuevo hospital en Bahía de Banderas, Nayarit, a la iniciativa privada a través de la figura de «concesión» y Asociación Público-Privada (APP).
Se trata de un nosocomio con capacidad para 144 pacientes en cama, en el que la mayoría de los servicios serán prestados por una empresa privada, empezando por la construcción del mismo.
La licitación pública, cuyo resultado se dará a conocer el próximo 12 de octubre, prevé concesionar la operación del hospital por 25 años a la empresa ganadora. El instituto pagará MIL 141 MILLONES DE PESOS a cambio de servicios como la fumigación, mantenimiento de las instalaciones y equipos, impresión, fotocopiado, esterilización, vigilancia, jardinería, estacionamiento, provisión de alimentos, entre otros.
Personal directivo y gerencial también será designado y contratado por la empresa beneficiada, mientras que el IMSS aseguró que el resto de los empleados —90 por ciento— serán trabajadores de base.
El instituto justificó la privatización del hospital con el pretexto de «falta de recursos». De hecho, en su último informe financiero, el IMSS reportó un déficit de operación de 13 mil 399 millones de pesos al cierre de 2015 y se proyecta supere los 27 mil millones de pesos en 2020.
Pese a ello, de acuerdo con el diario Reforma, el IMSS despilfarró MÁS DE 50 MILLONES DE PESOS por un contrato de adjudicación directa entregado a una empresa británica, para recibir «asesoría» en los proyectos de APP.
En efecto, el instituto tiene proyectado construir tres hospitales más en Chiapas, Estado de México y Nuevo León, «concesionándolos» a empresas privadas a través de la figura de APP.
El Instituto de Servicios y Seguridad Social de Trabajadores del Estado (ISSSTE) no quiere quedarse atrás en la privatización de su infraestructura y servicios —pagada por todos los mexicanos—, por lo que la semana pasada relanzó su licitación para la construcción de un hospital en Mérida, Yucatán, también bajo el esquema de APP. Dicha licitación había resultado desierta en el primer fallo.
Con información de Revolución 3.0
