México, 17 de julio 2015 (NOTIGODÍNEZ).- La devaluacion –«depreciación», se apresurarán a corregir los doctos en eufemismos– avanza sin pausa en su camino para colocar al dólar estadounidense en 17 PESOS y cobrar su cuota de millones de nuevos pobres, generados como nunca en la historia de este país con el asesino de Atenco usurpando, envileciendo y ridiculizando la «presidencia».
De acuerdo con el diario Reforma, tanto el dólar en operaciones al menudeo como el tipo de cambio al mayoreo volvieron a cerrar en los niveles más elevados de la historia –por quinta vez en lo que va del actual régimen usurpador– durante otra jornada bursátil negra, marcada por lo que sucede en el vecino país del norte.
La culpa ya no es de Grecia. Ahora, según el citado medio, la causa de esta nueva «depreciación» fueron «las expectativas por la normalización de la política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) que se fortaleció y los precios de petróleo bajaron». Cualquier anuncio, bueno o malo de esa institución extranjera, golpea a nuestra moneda como si aplastara a una mosca. Así de grave es nuestra falta total de soberanía.
El valor del dólar estadounidense cerró la sesión devaluando al peso a su peor nivel histórico, ofreciéndose en 16.20 PESOS POR UNIDAD y comprarse en 15.60, seis centavos más que ayer. Fue el banco Banamex, propiedad del grupo estadounidense Citigroup, el que ofreció el billete verde en su precio más alto.
El dólar alcanzó ese valor casi desde el inicio de la jornada, para no bajar jamás hasta el cierre de la misma.
En tanto, la divisa estadounidense para operaciones interbancarias al mayoreo también alcanzó un máximo histórico, cerrando en 15.91 pesos, 10 centavos más que su cierre previo. Son valores sin precedentes que encienden los focos rojos en la dañada economía mexicana.
Según el citado medio, estas alzas marcan el retorno de un balance semanal negativo para nuestra moneda. «Al menudeo perdió 18 centavos, y al mayoreo la baja fue de 18.75, entre el 10 y el 17 de julio», señala el rotativo.
Nuevamente, los pretextos evidencian la nula independencia de México frente a la Unión Americana. Reforma atribuye la debilidad del peso al «avance en el sector inmobiliario y la cifra de inflación estadounidense, pues los precios al consumidor aumentaron 0.3 por ciento en junio».
Con esa «explicación», ciertamente otros países también verían afectado el valor de sus respectivas monedas, sin embargo disponen de reservas suficientes para blindarse y evitar devaluaciones –como la que está ocurriendo en México –por el fortalecimiento del dólar.
Asimismo, las declaraciones de la presidenta a la Reserva Federal (Fed), Janet Yellen, como las cifras económicas de Estados Unidos conocidas en la semana, motivaron reformas a la expectativa de alza de tasas en el año en curso, lo que desde luego, impactó a nuestro débil peso que está a merced de estas decisiones tomadas en países extranjeros.
México está a la espera de una «recuperación económica y del mercado laboral en los próximos meses, que permitiría al menos un incremento a la tasa de referencia entre las reuniones de septiembre y diciembre», esto, en Estados Unidos –no en nuestro país– para tener un respiro frente a la devaluación rampante que perfila colocar el dólar hasta en 17 pesos, según pronósticos de la iniciativa privada.
Agradezcan estos «resultados» a treinta años (y contando) de «políticas» neoliberales que se nos vendieron como la panacea y cuyo único objetivo ya logrado fue aniquilar por completo la independencia económica de México.
Con información de Reforma
