México, 18 de mayo 2015 (NOTIGODÍNEZ).- Cuando salió la nota sobre la falla en el lanzamiento del satélite Centenario (MexSat-1) que derivó en la posterior destrucción del aparato en la atmósfera terrestre, en este medio alternativo dijimos con claridad que el «accidente» no había sido culpa del régimen usurpador, aunque sí constituía un reflejo de lo que ha sido hasta ahora la gestión espuria de Peña: UN DESASTRE. No obstante, pese a deslindar al sujeto, un grupete de imbéciles nos criticó de todas formas por la imagen utilizada. No quieren que toquemos ni un pelito al copete del asesino de Atenco.
Pero… ¡sorpresa! La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) –o sea el régimen usurpador de Peña Nieto– sabía con bastante anticipación que el cohete propulsor para poner en órbita al satélite estaba presentando fallas, y aún así decidió seguir adelante con el lanzamiento que tuvo los desastrosos y patéticos resultados ya informados. Por tanto, SÍ FUE CULPA DEL RÉGIMEN USURPADOR ENCABEZADO POR EL IMBÉCIL QUE ACTUALMENTE OCUPA LOS PINOS.
De acuerdo con el diario Reforma, la SCT sabía que el cohete Protón-M de la empresa International Launch Services (ILS), responsable del lanzamiento del satélite mexicano, presentaba fallas desde el año 2012. La propia subsecretaria de Comunicaciones, Mónica Aspe Bernal, confirmó lo informado por Reforma.
“El contrato ya estaba firmado, se analizó la posibilidad de salirse y buscar una alternativa; sin embargo, había un costo en el contrato, un castigo por salirse, una garantía de 60 millones en caso de cancelación”, justificó la empleada del régimen usurpador.
Argumentó que decidieron «arriesgarse» basados en un estudio realizado al firmar el contrato, en el que se constató que en 2012 la compañía ILS tenía una efectividad del 95 por ciento, por lo que se decidió hacer la firma con ella. Lástima que el dañino karma del asesino de Atenco, Peña Nieto, causara que la empresa amaneciera ese día en el 5 por ciento no efectivo. Pero lo realmente insultante es que al sujeto le importa un bledo, porque sabe que es el pueblo quien pagará y él seguirá burlándose de los mexicanos, como se muestra en la foto de esta nota.
Los costos al Estado mexicano –o sea a tu bolsillo, prole— por este cósmico fiasco ascienden a 390 millones de dólares según la propia Secretaría.
Aunque la SCT adelantó que el costo de fabricación del satélite Centenario, de 300 millones de dólares y los 90 millones de dólares del lanzamiento podrían recuperarse en su totalidad, falta que la empresa aseguradora –a la que México también pagó una suma millonaria– revise los resultados sobre la investigación que realiza el complejo ruso de Baikonur, para analizar las causas del accidente.
Si los resultados no son satisfactorios, la aseguradora podría negar el pago del seguro alegando cualquier «recoveco» en sus cláusulas, como suelen hacer con frecuencia estas empresas.
En suma, el régimen espurio de Peña Nieto también tiene responsabilidad directa en este millonario desastre espacial. Sin embargo, aún si el mismo Peña hubiera oprimido el botón de lanzamiento, su claque descerebrada seguiría defendiéndolo porque para eso también se gasta cuantiosos recursos públicos.
Con información de Reforma
