Diana Jiménez
E-Consulta
Mientras se encontraban solos, dos niños de 4 y 5 años de edad que jugaban con fuego, murieron asfixiados al inhalar humo cuando accidentalmente provocaron un incendio, en la colonia Luis Gonzaga.
Los hechos ocurrieron anoche en el domicilio ubicado en la Diagonal de la 44 Norte número 4218, donde el padre de las víctimas rentaba un departamento, en el cual dejaba a sus hijos al cuidado de dos mujeres, ya que él era papá soltero y trabajaba como empleado de una taquería hasta la madrugada.
Uno de los vecinos relató que llegó a la casa después la medianoche y percibió que olía a quemado en ese cuarto, pero debido a que no veía salir humo pensó que los menores -una niña y un niño- estaban jugando y querían quemar bombones.
«Mi esposa se preocupó, cerró el tanque de gas y quería tocarles y le dije: no, ya no ha de tardar en llegar su papá, y sí como a los 20 minutos llegó y empezó a gritar, salimos y ya llevaba a los niños cargando. Salía mucho humo del cuarto y pues cargamos a los pequeños, pero pues ya no tenían pulso», relató.
El testigo, que tiene algunos conocimientos en primeros auxilios, se percató que los niños ya tenían sus cuerpos fríos, pero aun así intentó darles respiración boca a boca, revisó su pulso y se dio cuenta que ya era tarde para salvarles la vida.
Los dos hermanitos, de nombres José Leonardo y Elizabeth García Morales, de 5 y 4 años de edad, al parecer ya tenían varias horas de haber fallecido, pues los vecinos comentaron que desde la tarde los vieron jugar con cerillos.
El papá, que labora como empleado en una taquería, se separó de su pareja sentimental y vivía solo con sus dos hijos, con quienes llegó a vivir a ese lugar hace aproximadamente dos meses; sin embargo, debido a que trabaja todo el día, contrataba a dos mujeres para que los cuidaran durante las mañanas y las tardes.
La niñera de la tarde tenía que retirarse a las 8 de la noche y los dejaba encerrados, por lo que se presume que ayer cuando se fue, los pequeños siguieron jugando con fuego sin la supervisión de un adulto y ello ocasionó que accidentalmente incendiaran el colchón de su cama.
El vecino señaló que los cuartos son muy cerrados y, como ni siquiera salió humo, nadie se percató de nada.
Luego de ser notificado, el agente del Ministerio Público de Homicidios se trasladó al lugar para hacer las diligencias de levantamiento de cadáveres.
