Transportistas prevén conflicto por la imposición del metrobús en Puebla que beneficia a particulares

Patricia Méndez y Samantha Páez
E-Consulta

Sin acuerdos transcurrieron este miércoles las negociaciones entre transportistas y el gobierno del estado para que los primeros saquen de la circulación sus autobuses y permitan el paso de la línea dos del Metrobús por la avenida 11 Norte-Sur.

Así lo confirmaron concesionarios de rutas que circulan por esa vialidad, quienes previeron un conflicto entre el gremio -que incluye también a conductores, mecánicos y electricistas- y la administración estatal, debido a que esta prometió poner en marcha la nueva ruta el 14 de enero sin hacer una oferta económica a los transportistas para dar paso a la nueva línea.

La segunda ruta del Metrobús poblano comenzará a operar con 160 autobuses, con lo cual 28 rutas de transporte público serán suprimidas.

Temen represalias en su contra

Los transportistas de los derroteros de la 11 norte-sur estimaron que la segunda troncal del Metrobús comenzará operaciones «a como dé lugar», un día antes del cuarto informe de gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas.

Por ese motivo el martes tuvieron una reunión con el subsecretario de Transportes, Carlos Martín Blanco Villasuso, quien los trató de convencer para que se sumaran al proyecto del metrobús en la ciudad de Puebla.

Pero como no accedieron, los empresarios temen que haya represalias en su contra, como lo ha hecho en los últimos días la ST retirando las unidades de transporte, y ante esa situación buscarán el apoyo de legisladores federales.

En una entrevista en la que pidieron no señalar sus nombres por temor a represalias, refirieron que la Secretaría de Transportes (ST) ha incumplido el compromiso que realizó meses atrás para anteponer el diálogo antes de intentar retirarles sus concesiones.

Recordaron que entre el lunes y miércoles, dicha dependencia y la Contraloría estatal han retirado de circulación alrededor de 80 unidades de las rutas Mayorazgo, Galgos del Sur, 34, 34ª, 54 Y 54ª, entre otras, lo que ha afectado a más de 25 mil familias.

Las dependencias estatales utilizaron argumentos como fallas mecánicas, tener publicidad no autorizada y hasta contar con adornos, para retirar placas de circulación a las unidades y llevarlas a corralones.

Detallaron que hasta ahora son pocos los grupos de concesionarios que sí sostienen pláticas con la ST para sacar de circulación sus derroteros, sin embargo la mayoría ha optado por apegarse a la ley, es decir, solucionar las anomalías por las que la ST ha retirado de circulación sus unidades o bien, ampararse para evitar que sus permisos les sean retirados.

Lamentaron que el gobierno del estado no ceda en su postura de sacarlos de circulación, pues la decisión afectará a cientos de familias que obtienen ingresos derivados de las rutas.

En este sentido, reiteraron que recurrirán a los amparos que en 2014 tramitaron para que no les fueran retiradas sus concesiones –de los cuales fueron resueltos a su favor 40– ante la postura del gobierno estatal.

Unidades de prueba no son las finales, señalan

Los empresarios del transporte agregaron que los camiones articulados que circularon el 6 de enero por el carril confinado son sólo prototipos, pues las unidades que estarán dando el servicio no han sido adquiridas.

Hasta el momento el gobierno estatal ha presupuestado 2 mil 35 millones de pesos para las líneas 2 y 3 del metrobús, aunque sólo la primera de ellas se terminará durante este sexenio, ya que la tercera quedará como proyecto para la administración estatal siguiente.

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