Pedro Matías
Proceso
OAXACA, Oax. (apro).- El Frente Indígena de Organizaciones Binacionales (FIOB) lamentó que el presidente Enrique Peña Nieto asuma el papel de policía del gobierno de Estados Unidos en la frontera sur para contener a los migrantes centroamericanos que buscan reunirse con sus familias en el vecino país del norte.
José González, vicecoordinador del FIOB, exigió a los mandatarios Barack Obama y Peña Nieto que respeten a la niñez migrante y no se les trate como delincuentes.
Asimismo censuro la decisión el gobierno mexicano de impedir a los migrantes subir a La Bestia, cuando es el único medio que tienen los migrantes para trasladarse a Estados Unidos.
“Ojalá el gobierno pusiera autobuses. Eso sería mucho mejor que invertir dinero en contratar policías para impedir el viaje de migrantes”, puntualizó.
En su opinión, este tipo de políticas represivas “hacen más caro el tránsito de los migrantes y pone más en riesgo a los menores que solo buscan sobrevivir de las pandillas o mafias de sus países de origen y las que enfrentan en territorio mexicano”.
Los métodos del gobierno, reiteró, no son los adecuados; impiden reunificar a las familias y someten a los migrantes a mucha violencia porque tienen que sortear a la policía, a la migra y a la delincuencia organizada.
González dijo que da pena decirlo, pero México y Estados Unidos se han asociado con políticas injustas y racistas para deportar también a niños nacidos en Estados Unidos.
“Hay niños que vienen a conocer a sus abuelos y a su regreso siendo ciudadanos estadounidenses no les permiten el ingreso”, dijo.
En junio pasado fueron deportados 150 niños de la mixteca baja, particularmente de Juxtlahuaca, Tlaxiaco y Huajuapan.