Emilio Escobar
E-Consulta
Un joven de 27 años de edad fue asesinado de manera brutal al interior de un templo religioso ubicado en la tercera sección de Chignautla. Los responsables del crimen se dieron a la fuga llevándose varios aparatos electrónicos, por lo que una de las principales líneas de investigación, es la del robo.
En el templo denominado Shalom, el agente del ministerio público de Teziutlán efectuó el levantamiento de cadáver de Blas Dionisio Cesáreo, quien se desempeñaba como vigilante del inmueble.
Uno de sus compañeros refirió que el viernes aproximadamente a la una de la madrugada, estaban trabajando cuando llegaron dos sujetos que arremetieron contra Blas, y tras golpearlo lo llevaron hasta un cuarto donde le quitaron la vida.
Lo amarraron de pies y manos con cinta transparente y luego lo degollaron. Cuando escaparon del lugar, se llevaron equipo de sonido, bocinas y otros enseres. Cabe mencionar que no se están descartando otras líneas de investigación.