Ésa es la consigna: que cualquier apoyo popular desaparezca, que la gente se vea «obligada» a ir a comprarle a Walmart, a SoPRIana o a la «Comer».
REFORMA / Redacción
Cd. de México (14 septiembre 2014).- Las tiendas y farmacias del ISSSTE están agonizando.
Grupo Reforma realizó recorridos por establecimientos del Instituto en 12 entidades y encontró tiendas desiertas, escasa oferta de productos, falta de medicamentos y refrigeradores vacíos.
En el Distrito Federal, fueron visitadas 10 de las 22 sucursales y, de acuerdo con empleados y clientes de las tiendas, este problema lleva varios meses.
«Hoy en la mañana, quería comprar 20 refrescos grandes porque teníamos un convivio y no había suficientes. Nunca hay muchas cosas», comentó Roberto, quien es cliente del SuperISSSTE Doctores sólo porque le queda cerca.
«Ya no encuentro cosas como antes. Por ejemplo, vine a buscar leche Lala y no había; cereal Nesquick, y tampoco. Los refrigeradores de salchichonería estaban vacíos. Esto es desde hace aproximadamente un año», lamentó María del Carmen Gutiérrez, clienta de la sucursal de Santa Ana y Canal Nacional.
Ese problema se detectó también en las tiendas ubicadas en las colonias La Romana, en Tlalnepantla, Santa Cruz Acatlán y Alce Blanco, en Naucalpan, Estado de México.
«Las farmacias se han convertido en boticas. Encuentras Vick Vaporub, antigripales, curitas, pero yo necesito Citalopram, y aquí nunca hay. Yo me voy a lo más económico que es Walmart», externó María Gloria Chaidez, jubilada del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), quien acude por despensa a la tienda ubicada en la Colonia Jardín Balbuena, en el Distrito Federal.
En el estado de Nuevo León la mayoría de las tiendas del área metropolitana de Monterrey también muestran signos de desabasto, especialmente en farmacia.
El caso más severo, la tienda de la Colonia San Rafael, en Guadalupe, donde empleados señalaron que no tienen suficientes medicamentos y que posiblemente no los vuelvan a surtir.
En Jalisco, la escena se repite en la zona metropolitana de Guadalajara.
Empleados consultados en los diferentes estados aceptan que los proveedores ya no surten porque el ISSSTE tiene adeudos pendientes con ellos.
«Nosotros no sabemos la circunstancia de por qué dejaron de surtir. Si el proveedor no te visita, viene el promotor y le decimos ‘oye, ¿por qué no han surtido’?, y responde que está cerrada la cuenta», señaló un trabajador.
«Se rumora que es porque el ISSSTE le debe a los proveedores, pero los clientes señalan que la diferencia en precios con tiendas de autoservicio ya no es tanta», explicó un empleado.
Cifras oficiales sustentan la caída que registra la red comercial del SuperISSSTE, integrada por 250 tiendas y 88 farmacias abiertas a todo el público.
Este año, en el Presupuesto de Egresos se fijó una meta de 55 millones de clientes y ventas por 5 mil 69 millones de pesos.
Y, para el año siguiente, el proyecto presupuestal baja la meta a 31 millones de clientes, 44 por ciento menos, y prevé una caída en las ventas de 35 por ciento.
Luis Antonio Godina, secretario general del ISSSTE, informó que 35 tiendas SuperISSSTE localizadas en 20 estados del País fueron cerradas en 2013 debido a las pérdidas económicas que representaron.
Añadió que este sistema presenta déficit desde 2008.
El cierre de estos supermercados, aseguró, no significa que este sistema desaparezca, pues el propósito es mantenerlo.
En Chilpancingo, Guerrero, trabajadores externaron que, ante la falta de productos, se rumora que habrá cierre de tiendas en diciembre.
«Yo tengo aquí trabajando 30 años y nunca como ahora habíamos visto esta crisis «, dijo el empleado de una de las dos sucursales ubicadas en la capital guerrerense.
Fernando Laso, gerente de los dos establecimientos, reconoció que el desabasto se ha agudizado.
«Yo llegué apenas hace dos meses a ocupar este cargo, pero me dicen los trabajadores que este problema es desde hace cinco años», refirió en entrevista.
En Guanajuato, empleados de una de las 11 tiendas del ISSSTE en el Estado reconocieron que hace algunos años vendían cualquier tipo de medicinas, pero que hoy solamente tienen tratamientos para males menores.
«Está prohibido vender medicamentos como antibióticos o aquellos que requieran de receta médica. Tiene mucho tiempo que no han surtido el área de farmacia, sólo vendemos los que no requieren receta médica», externó una trabajadora.
Pero también existe desabasto de distintos artículos.
«Cada tres semanas nos surten mercancía, pero no toda llega completa. Es un problema de las oficinas centrales de la Ciudad de México. La gente se molesta en ocasiones porque no encuentra lo que necesita»,externó una cajera de la sucursal de Silao.
En Irapuato hay anaqueles vacíos. Las etiquetas marcan el precio de productos que no se encuentra en existencia.
‘Lleve canasta, aunque no la llene’
En el SuperISSSTE de Villahermosa, Tabasco, apenas hay dos personas que recorren los tres pasillos de la pequeña tienda.
A uno de ellos, el gerente lo alcanza para darle con amabilidad una canastilla con ruedas.
«Tome una, aunque no la llene», le dice.
Y así sucedió. El cliente recorrió una y otra vez los pasillos y no llenó la canasta.
Apenas consiguió echarle tres litros de leche, un rollo de papel aluminio y tallarines, ante el poco surtido de alimentos.
En la tienda no hay área de salchichonería ni de cualquier otra línea de productos perecederos.
En el área de farmacia hay unos cuantos productos en un anaquel, aunque lo que más abunda son toallas higiénicas.
Tampoco hay problema de estacionamiento, pese a que son solo son seis los cajones.
Esta tienda, junto con las ubicadas en las cabeceras de los municipios de Cárdenas y Teapa, son las tres únicas que quedan, pues en noviembre pasado fue cerrada la de Centla.
«Casi no vendíamos nada y no competíamos en ofertas ni surtido. A mí me tuvieron que reubicar en Villahermosa», comentó una trabajadora.
En Querétaro, las tres tiendas del ISSSTE tienen las bodegas vacías.
«Llenamos con lo poquito que tenemos. Tenemos (en exhibición) todo», reveló una empleada del establecimiento ubicado en Avenida Corregidora Norte.
«Cubrimos con lo que tenemos. Pero nos faltan muchas cosas» reconoció Laura Iriarte, encargada del área de belleza de la tienda ubicada en Avenida 5 de Febrero.
En Morelos, las dos principales tiendas del ISSSTE en Cuernavaca y Jojutla fueron cerradas.
«La que quedó es una en el centro de Cuernavaca chiquitita», explicó Guillermo del Valle, delegado del ISSSTE en Morelos.
