México, 2 de marzo 2015 (NOTIGODÍNEZ).- Bien dicen por ahí que «el que por su gusto es buey, hasta la coyunda lame»… y ahí tienen a los pobladores de San Blas, municipio del saqueado y empobrecido estado priista de Nayarit, eligiendo como su representante a un ladrón «honesto» que admite robar «pero nomás poquito». Lo que no especificó a sus imbéciles votantes es qué tanto es «poquito».
El pasado sábado 28 de febrero, el hoy alcalde Hilario Ramírez Villanueva convocó a un festejo masivo con motivo de sus 44 años, en la localidad de Huaristemba, de donde es originario.
Aunque hasta el momento no ha especificado el costo del «fiestón», se informó que el sujeto repartió un millón 200,000 cervezas, se mataron 50 reses para birria y se ofrecieron otras «viandas» para los más de 50,000 asistentes. Además se contó con la presencia de la Banda «El Recodo», oriunda también del muncipio natal del «festejado».
Durante la parranda hubo todo tipo de abusos y excesos, pero lo que más indignó a la opinión pública no fue el dispendio millonario del dinero del pueblo para festejar el cumpleaños de un ladrón, sino el «bailecito» del ex panista con una mujer a la que humilló subiéndole el vestido en dos ocasiones.
En redes sociales se difundió el video que captó el instante en que el sujeto, quizá alcoholizado, bailotea con una mujer que porta un corto vestido con estampado rosa, mientras la banda tocaba en vivo detrás de ellos. Haciéndose el «gracioso», el abusivo sujeto manoseó a la joven y luego le subió el vestido de modo que la ropa interior de la agredida quedó al descubierto. Apenada pero sonriente, la joven se reacomodó la minifalda y siguió bailando con el ridículo «edil». Segundos después, éste volvió alzarle el vestido para exhibir ante el público las pantaletas de la mujer, avergonzándola.
http://www.youtube.com/watch?v=GhcI8AaUeXs
Ah, entonces sí todo mundo se rasgó las vestiduras y sacó a relucir su doble moral, cuando el verdadero escándalo es que este sujeto miserable, ratero, corrupto y bueno para nada, esté mamando el dinero del pueblo de San Blas y despilfarrándolo en guarapetas mientras la gente se muere de hambre.
Un ejemplo de esta doble moral: el farsante «secretario general de Gobierno» de Nayarit, José Trinidad Espinoza Vargas, quien «condenó los actos del político», es decir, simuló indignación, le hizo al cuento declarando un par de estupideces de dientes para afuera y, claro, no hizo NADA para evitar que el criminal ése siga robando. Entre cómplices no se tocan.
“El respeto es un valor fundamental que debe regir nuestro comportamiento social”, dijo el «funcionario» en Facebook (ni siquiera en vivo). «La política no debe ensuciarse con acciones que denigran, que vulneran y que ofenden […]; la mujer es sinónimo de honor, lealtad, afecto y amor. Quien las violenta nos vulnera a todos. Nos lastima a todos. No a este tipo de acciones”, dijo Espinoza, rasgándose las vestiduras.
Para colmo, organizaciones sociales «exigieron»… ¿su renuncia? ¿cárcel para el ratero? ¿que devuelva lo robado? No. «Exigieron una disculpa pública».
Repetimos: EL QUE POR SU GUSTO ES BUEY, HASTA LA COYUNDA LAME.
“El que por su gusto es buey, hasta la coyunda lame”, la descomposicion de una sociedad y la connivencia con un ratero confeso…