México, 1 de diciembre 2015 (NOTIGODÍNEZ).- La agencia internacional Moody’s redujo hoy la calificación a la «empresa productiva del Estado» Petróleos Mexicanos (Pemex), al considerar que su deterioro financiero y la baja en los precios internacionales del petróleo, impedirán que la petrolera mexicana pueda cubrir sus gastos de operación en el corto plazo. Es decir, Pemex se encuentra al borde de la quiebra.
De acuerdo con Mautro Leos, analista sobrerano de México de la agencia calificadora de deuda Moody’s, citado por el diario La Jornada, Pemex no será capaz de generar suficiente liquidez para cubrir sus gastos operativos, de servicio de la deuda e inversiones de capital. Por ello, la consultora internacional degradó a la otrora paraestatal desde una calificación de A3 hasta Baa1.
Según el analista, la situación de Pemex es más grave de lo que parece, pues la crisis financiera y operativa por la que atraviesa es de tal magnitud, que requerirá la «intervención del gobierno mexicano» para asumir algunas responsabilidades de la empresa.
¡Claro! Ahí está otra vez el plan con maña. Que el «gobierno» –pandilla de criminales neoliberales al servicio de intereses extranjeros– decida qué hacer con el patrimonio de todos los mexicanos, o sea PRIvatizarla. Ésa siempre ha sido su consigna desde que comenzaron el saqueo y el proceso de quiebra deliberada.
“La combinación de los menores precios del petróleo y los menores niveles de producción significa que Pemex no podrá generar el efectivo suficiente para cubrir sus gastos operativos, de servicio de la deuda y de inversiones de capital. Esto sugiere un riesgo bajo, pero en aumento, de que pudiera solicitarse apoyo extraordinario al gobierno para dar soporte a la compañía. Sin embargo, la calificación de bonos soberanos de México (A3 estable) permanecerá bien aislada de las presiones operativas y financieras de Pemex. Esto debido a que la relación financiera y económica entre México y Pemex es, de manera importante, menor hoy que en el pasado”, dijo Leos citado por La Jornada.
Según Leos, el financiamiento que requiere Pemex asciende a 25 MIL MILLONES DE PESOS AL AÑO –monto equivalente al 2 por ciento del Producto Interno Bruto– para rescatar a la otrora paraestatal por su importancia en la economía y el papel estratégico que juega en el desarrollo nacional. Sin embargo, dado que el acceso a los mercados de financiamiento se cierra cada vez más, el «gobierno» tendría que apoyarla en algún momento.
De facto, los regímenes usurpadores en turno han hecho lo que han querido con Pemex y sus finanzas. La quiebra de la empresa –causada por ellos mismos– será el pretexto perfecto para que el actual régimen usurpador tome «oficialmente» el control de Pemex y la privatice.
La presión en los precios interacionales del petróleo precipita la caída en los ingresos de esa empresa de todos los mexicanos, por lo que el endeudamiento –por cierto, cada vez más alto en el actual sexenio– comenzará a devorarla sin control.
Con información de La Jornada