México, 22 de diciembre 2015 (NOTIGODÍNEZ).- El desastre, mucho peor al actual, en ese convulsionado y saqueado municipio se avecina…
A unos días de asumir el cargo como «presidente municipal» de Cuernavaca, Morelos, abanderado por el «Partido Social Demócrata» (PSD), el exfutbolista Cuauhtémoc Blanco envió una carta abierta al actual usurpador Enrique Peña Nieto, pidiéndole «auxilio» para gobernar el municipio.
O sea que, al estilo Fox en 2000 –que sacó al PRI de Los Pinos por la puerta de enfrente y luego lo metió por la puerta trasera–, miles de habitantes de Cuernavaca (supuestamente) votaron por Blanco para sacar al PRI de la ciudad, y él ya lo está metiendo de nuevo, nada más que suplicando descaradamente que regrese a tomar el control. Así, Blanco actúa como un animal salvaje, aterrorizado por la situación y traicionando a sus electores sin darse cuenta de lo que está haciendo.
«Yo estoy con los ciudadanos y no con los políticos traidores», dice el absurdo Blanco en el mensaje que envió desde la red social Twitter con la carta adjunta. La enfermiza paradoja en sus torpes palabras es más que evidente, pues la petición de ayuda va dirigida al traidor más deleznable y criminal de nuestra historia.
En la misiva, Cuauhtémoc Blanco reconoce veladamente su absoluta ineptitud frente a las responsabilidades que se echó encima, «sonsacado» por los oportunistas que impulsaron su candidatura para hacerse de los recursos municipales, por lo que pide a Peña Nieto que lo ayude a «resolver la situación en la que viven miles de familias”.
Asimismo, acusó a “9 regidores en funciones de la administración municipal, que intentan por todos los medios posibles y sin algún argumento de un verdadero interés ciudadano, llevar a cabo de manera sorpresiva cambios en el Reglamento de Gobierno Municipal, con el único objetivo de quitar toda la autoridad al presidente municipal entrante”.
El ígnaro individuo acusó con Peña –otro ignorante mucho peor– a los regidores de tratar de generar un clima de crisis en Cuernavaca para beneficio de sus «intereses políticos y personales», así como en favor de «personajes polémicos» del municipio que, según Blanco, le hacen mucho daño a la gente y sólo buscan seguir saqueando.
En ese sentido, señaló al desgobernador Graco Ramírez, aliado de Peña Nieto y el PRI; a su hijastro, Rodrigo Gayosso, presidente del PRD en Morelos, y al exalcalde Manuel Martínez Garrogós, quienes, según los chilloteos de Blanco, operan en su contra.
Así que, en lugar de cumplir las paparruchas que cantinfleó durante su «campaña», el bestial Cuauhtémoc Blanco pide que regrese el PRI a través de un sujeto mucho peor que él mismo –Peña Nieto–, porque al menos hasta donde sabemos, Blanco puede ser ignorante, vulgar, primitivo y violento, pero no un asesino.
Aquí la carta que Blanco difundió en Twitter:
Yo estoy con los ciudadanos y no con los políticos traidores. #Cuernavaca @EPN pic.twitter.com/oKn1OqFf07
— Cuauhtémoc Blanco (@cuauhtemocb10) December 21, 2015
En realidad, Blanco está haciendo lo mismo que hizo «El Bronco» y han hecho los demás «gobernadores» en el actual sexenio: entregar el control de los gobiernos en las entidades que ganaron a Peña, sólo que Blanco es como una bestia salvaje sin capacidad de simulación. En ese sentido, quizá sea más honesto que los demás criminales que se hacen llamar «gobernadores».