México, 9 de enero 2016 (NOTIGODÍNEZ).- Mientras embrutece a la gente con circos y fuegos artificiales mediáticos, el régimen usurpador de Enrique Peña Nieto sigue enriqueciendo con dinero público a trasnacionales criminales. ¡Claro!, para eso impusieron a ese sujeto en Los Pinos.
De acuerdo con el diario Reforma, la «Comisión Nacional del Agua» (Conagua) habría otorgado un contrato por 231 MILLONES DE PESOS a una empresa francesa con la que dicha dependencia ya había tenido conflictos.
Refiere el citado medio que Degremont fue expulsada de Puebla en 2012, luego de que la propia Conagua detectara altos niveles de contaminación en las cuatro plantas tratadoras de agua que la empresa controlaba en esa entidad. Por ello, el gobierno de Puebla solicitó la salida de la trasnacional y la «Secretaría de la Función Pública» (SFP) simuló investigar a los funcionarios involucrados.
Sin embargo, el pasado 23 de diciembre la propia Conagua otorgó la licitación y el contrato por 231 millones de pesos para que Degremont construya la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales en el Bosque de Chapultepec.
Dicha licitación confiere a la estafadora trasnacional francesa el control del rescate de los lagos del Bosque de Chapultepec, como parte central del proyecto que la Conagua impulsa en vías de privatizar el vital líquido en todo el país.
Detalla Reforma que, pese a haber estafado al «gobierno» de Puebla, la multinacional francesa dispone de proyectos en varias ciudades del país.
Asimismo y de forma totalmente inexplicable, se permitió a la compañía francesa echar abajo un contrato de asociación público-privada por 575 millones de pesos, que la Conagua ya había asignado a empresas de Carlos Slim –ladrón que roba a ladrón… — para construir la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) El Caracol, en Ecatepec, Estado de México.
Con el nuevo proyecto que Conagua adjudicó en Chapultepec a Degremont, se pretende mantener el agua de los lagos en constante circulación, utilizándola para el riego de áreas verdes y pozos, así como para recarga artificial del acuífero. Sin embargo, el control de la planta que llevará a cabo estas acciones quedará totalmente en manos de la empresa francesa, lo que constituye una privatización de facto de las aguas del lago.
Así que encima de entregar los recursos de los mexicanos a trasnacionales, el usurpador les paga para que se los lleven. ¡Generoso el delincuentazo! ¿Y los mexicanos, principales perjudicados con este saqueo? Muy pendientes de la «chapo-novela» y tragando camote…
Con información de Reforma