México, 22 de enero 2016 (NOTIGODÍNEZ).- La criminal Elba Esther Gordillo, lideresa vitalicia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) –brazo armado del PRI en el magisterio–, prácticamente no ha pisado la cárcel desde que fue «detenida» en febrero 2013, acusada de manejar recursos de procedencia ilícita y fraude fiscal.
A semanas de su consignación al penal femenil de Santa Martha, fue trasladada «por problemas de salud» a la Torre Médica del penal de Tepepan y desde ahí ha seguido su «proceso». En fechas recientes intentó conseguir un amparo para gozar de «prisión domiciliaria», igualmente argumentando cuestiones médicas, pero le fue negado. No obstante, sigue sin volver a su celda y las «autoridades» han estado paseándola de hospital en hospital.
La agencia Proceso informó que la subsecretaría del Sistema Penitenciario capitalino volvió a trasladar a Gordillo ayer por la noche, ahora del hospital Ángeles Interlomas al de hopital público de Xoco, para realizarle una «valoración médica».
Marco Antonio del Toro, abogado de la saqueadora exlideresa, confirmó a la prensa que Gordillo Morales ya había sido ingresada al nosocomio ubicado en la delegación Benito Juárez, aunque aseguró sólo que de manera “temporal”.
Sin embargo, esta mañana el propio Miguel Ángel Mancera, de facto regente priista del Distrito Federal, confirmó que Gordillo permanecerá de forma indefinida en el hospital de Xoco «para recibir los cuidados y la atención necesaria». ¡Ay, como la cuidan a la corruptaza asquerosa ladrona! ¿Así cuidan a Mireles o a Rubén Simitrio Sarabia ?
Proceso recordó que el 18 de noviembre pasado, su petición de recibir prisión domiciliaria en su lujoso penthouse de Polanco le fue negada, pero que el Sistema Penitenciario capitalino autorizó trasladarla al hospital Ángeles Interlomas para que se le atendiera de dos «aneurismas».
Mañosamente y derrochando el dinero que ha robado a los maestros, la criminal Gordillo ha seguido promoviendo amparos para evitar que las «autoridades» la regresen a la Torre Médica del penal de Tepepan, en Xochimilco. Y como las «autoridades» casi no son proclives a estirar la manota… pues ahí tienen a la delincuente feliz de la vida, haciéndose la «enfermita» ahora en Xoco. ¿No están hartos de tantas burlas y tomadas de pelo?
Con información de Proceso