México, 12 de mayo 2016 (NOTIGODÍNEZ).- Y seguimos repitiendo la demencial historia de cada farsa llamada «elección»: compra de votos, miseria y hambre con fines de lucro en favor de los criminales causantes de esa ignominia.
Un video que circula en redes sociales, muestra a vecinos de Pueblo Nuevo, Oaxaca, irrumpiendo y saqueando una bodega repleta de despensas, refrigeradores, estufas, bicicletas, triciclos, playeras y otras baratijas que se usarían para la compra de voto en favor del priista Alejandro Murat Hinojosa.
En el video se puede observar el ajetreo de los ciudadanos al interior de la bodega, llevándose los refrigeradores, tanques de gas, recipientes de plástico llenos de alimentos y productos utilitarios, así como las bicicletas para niño.
La persona que documenta el saqueo, exhibe también montañas gigantescas de playeras y propaganda de la coalición conformada por las bandas criminales del PRI, Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y Partido Nueva Alianza (Panal), encabezada por el delincuente Alejandro Murat.
http://www.youtube.com/watch?v=PK2UFPlkDhE
De acuerdo con información que circula en medios, los hechos habrían ocurrido la tarde de ayer en la colonia La Joya, esquina de las calles de San Antonio y la carretera internacional que comunica a Oaxaca con la Ciudad de México, en la agencia municipal de Pueblo Nuevo.
Una denuncia anónima alertó a los vecinos, quienes a su vez informaron del hallazgo de la bodega a la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade), así como al Ministerio Público para que tomara conocimiento de la existencia de la bodega.
No obstante, ante la tardanza del personal de ambas instancias, los vecinos irrumpieron violentamente en el inmueble, llevándose prácticamente todo lo que había en su interior, excepto la propaganda electoral.
De hecho, los ciudadanos utilizaron todo tipo de vehículos para trasladar los artículos, desde motonetas y hasta camiones de volteo.
Por la noche, patrullas de la Policía Municipal llegaron finalmente a resguardar el lugar, pero ya estaba completamente vacío y la evidencia desaparecida por los propios vecinos.
«Ladrón que roba ladrón»… pensarán algunos. No. Esas despensas fueron pagadas por los propios habitantes. Para el delincuente Murat no se perdió nada, al contrario. Al rato volverá a saquear el erario para «surtirse» otra vez y reanudar la compra de votos de los imbéciles que en lugar de reaccionar y poner fin al verdadero abuso, durmieron «satisfechos» por haberse robado unas cuantas despensas pagadas por ellos mismos…
las depensas ya estaban pagadas con sus impuestos