México, 24 de enero 2019 (NOTIGODÍNEZ).- El priista Alfredo del Mazo Maza, usurpador del gobierno del Estado de México, fue repudiado y abucheado por habitantes de la comunidad de Acambay, perteneciente a la cabecera municipal del mismo nombre, en presencia del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Fue el pasado martes 22 de enero cuando López Obrador presentó en Acambay su Plan de Desarrollo para el Bienestar, dirigido a las 91 comunidades de escasos recursos que, por necesidad, se ven obligadas a robar combustible mediante tomas clandestinas en ductos de Pemex. Al presentar el programa, el tabasqueño saludó al usurpador Del Mazo y agradeció su presencia, lo que desató la inconformidad de los pobladores ahí reunidos.
«Amigas, amigos de Acambay, me da gusto estar de nuevo con ustedes en el Estado de México, en compañía del ciudadano gobernador Alfredo del Mazo», arrancó su discurso siendo inmediatamente interrumpido por una sonora rechifla y alaridos de repudio de la concurrencia, incluyendo recordatorios maternales al usurpador del gobierno estatal.
Sorprendido y molesto, López Obrador intentó tranquilizar a la gente y aseguró que su administración trabaja en coordinación con el «gobierno» estatal priista. Sin embargo, el repudio contra Del Mazo se prolongó por varios segundos ante los intentos fallidos del tabasqueño por calmar a los pobladores.
«Por decisión de los dos gobiernos, estamos trabajando unidos, juntos, ya pasó la campaña», clamaba López Obrador mientras la rechifla contra Del Mazo subía de tono.
Más adelante, López Obrador presentó su programa de apoyo para los habitantes de Acambay, que incluye el reparto de hasta 8 mil pesos mensuales a familias de escasos recursos, y exigió a los pobladores abandonar la práctica perversa del robo de combustibles. «¡Se acabó el huachicol!», demandó.
“¿Cuento con ustedes? ¿Se acabó el huachicol? ¿Vamos para adelante?”, preguntó el tabasqueño a los asistentes, quienes respondieron al unísono con un sonoro “sí”. Posteriormente, se acercaron y volvieron a prometer al tabasqueño que dejarían de robar combustible.
Alfredo del Mazo Maza usurpa la gubernatura del Estado de México desde el 16 de septiembre de 2017, luego de un fraude electoral descarado que las «autoridades» electorales estatales y federales convalidaron, en complicidad con el entonces régimen usurpador del asesino de Atenco, Enrique Peña Nieto, primo de Del Mazo.
En su momento, el tabasqueño acusó a Peña de impulsar aquel fraude electoral y denunció que las «instituciones» electorales encargadas de vigilar el proceso, no servían para nada porque estaban «al servicio de la mafia del poder».
Opinión:
El colmo de la inmoralidad e indignidad que AMLO convalide y hasta defienda de ese modo a un criminal de la ralea de Alfredo del Mazo, desoyendo los airados reclamos del pueblo harto de esos delincuentes. ¿Qué diablos hace AMLO legitimando al abominable Del Mazo y, con él, a todo lo que representa? Esa escena inmoral y decadente, plasmada en las muchas imágenes del viejo abrazándose con priistas y panistas al por mayor, debería ser suficiente para que los seguidores de AMLO se den cuenta de la farsa. Por desgracia no enfrentarán la realidad. Es más fácil evadirse a través del fanatismo y la fe irracional en un «mesías» a todas luces falso e impostor. Pobre México…
