México, 30 de mayo 2019 (NOTIGODÍNEZ).- Alejandro Murat Hinojosa, “gobernador” priista del empobrecido estado de Oaxaca, quedó en ridículo al exhibir su absoluta ignorancia frente a preguntas importantes de los medios de comunicación, durante la inauguración de un parque eólico de la trasnacional japonesa Mitsubishi en Juchitán, el pasado martes 28 de mayo.
Ante unos 200 acarreados, en su mayoría trabajadores de la empresa y del gobierno estatal, Murat se llenó el hocico presumiendo que la entidad es una de las primeras en crecimiento económico e industrial del país. Cabe mencionar que el sujeto estuvo acompañado de la secretaría de Energía, Rocío Nahle, y el evento se llevó a cabo prácticamente a escondidas de la población que siempre se opuso a la construcción de ese parque eólico.
De acuerdo con la agencia Proceso (Apro), Murat celebraba con euforia casi orgásmica la inversión de MIL 200 MILLONES DE DÓLARES por parte de la empresa Mitsubishi, para la construcción del parque “Energía Eólica del Sur”, considerado el más grande de Latinoamérica, con 132 aerogeneradores con capacidad para generar 396 Mega Watts cada uno, además de dos subestaciones y 77 torres.
“¿Están contentos de que hay desarrollo en Oaxaca o no?”, preguntó a los asistentes, pero él mismo respondió: “Yo estoy más contento porque hoy es un día de fiesta, porque Oaxaca crece al 3.9 %. Nunca en la historia de Oaxaca habíamos crecido a este ritmo. Somos el cuarto estado de mayor crecimiento del país. Y, de acuerdo con datos del Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía), también del crecimiento industrial, porque Oaxaca creció al 11.5 %. Somos el segundo estado de mayor crecimiento industrial del país”.
“Para que lo puedan poner en contexto, estamos creciendo seis veces arriba de Nuevo León y nueve veces arriba de la Ciudad de México”, siguió presumiendo. “¿Cuándo habíamos pensado o soñado que se podía? Sabíamos de la riqueza de nuestro estado, pero necesitábamos de un apalancamiento (…) y desde el inicio de mi gobierno teníamos que mandar el mensaje que de que hay condiciones para desarrollar el estado (…) Hoy Mitsubishi es parte de nuestras familias”, se adornó zalamero.
Enseguida vinieron las preguntas incómodas de los medios ahí presentes:
“¿Cuánto pagó en impuestos la empresa japonesa Mitsubishi y en que se invirtió el dinero?”, cuestionó un reportero.
“¿Por qué le preguntas eso al gobernador? Él no sabe de eso, pregúntalo a otros”, fue la respuesta del equipo de Murat, quien molesto ignoró la pregunta.
“Las inversiones son muy importantes, pero ¿cuánto es lo que dejan en impuestos las empresas eólicas?”, insistó otro trabajador de la prensa. No hubo respuesta y Murat siguió regodeándose en “el crecimiento de Oaxaca”. Sin embargo, ante la insistencia sobre la cifra de impuestos que debe cobrar el estado por las inversiones presumidas, un irritado Murat respondió:
“Pues el impuesto que paga cualquier empresa del país. Habría que checar el dato porque hay muchos impuestos, pero con mucho gusto les paso el dato”.
“¿Cómo no va a saber usted si es el gobernador?”, reviraron los reporteros.
“El que cobra impuestos es el SAT (Servicio de Administración Tributaria)”, se deslindó mintiendo –por ignorantazo–, ya que el estado también cobra impuestos por diversos servicios y, en efecto, el gobernador debe estar al tanto de esos ingresos para la entidad.
Rocío Nahle también fue increpada por la activista zapoteca Magaly Sánchez Santiago, intergante de la Coalición Obrero Campesino Estudiantil del Istmo (COCEI- Movimiento de Liberación), quien fue la única invitada “incómoda” en el evento. Sánchez denunció que no se realizó una consulta adecuada sobre la construcción del parque eólico de Mitsubishi, que los pobladores fueron despojados y que las comunidades siguen asfixiadas con altos cobros de luz pese a la proliferación de plantas y parques eólicos que deberían abaratar el servicio.
Opinión:
Nada qué decir sobre esta basura priista llamada Alejandro Murat Hinojosa. Se dice «gobernador» y ni siquiera sabe cuánto recibe su estado por concepto de impuestos. Pero la vergüenza es para el pueblo de Oaxaca que lo sigue manteniendo. Por otro lado, es repugnante la colaboración del “gobierno” federal con el delincuentazo, ignorante y pusilánime Murat, para ponerse al servicio de una trasnacional extranjera. AMLO prometió cambio y sigue haciendo exactamente lo mismo que sus espurios antecesores: privilegiar los intereses trasnacionales por encima del bienestar de la población. En el caso de Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto, ya sabíamos que eran usurpadores al servicio del neoliberalismo feroz. Pero AMLO se aventó 18 años prometiendo que las cosas cambiarían, que se acabaría la corrupción, que derrocaría al neoliberalismo y que defendería a México. Así que ustedes, seguidores de AMLO, también son responsables de la farsa. Deberían estar alzados en rebelión exigiendo que AMLO cumpla su palabra e impulsando, desde la conciencia y dignidad, el verdadero cambio. Pero su inmovilidad, negligencia y fanatismo, son la causa principal de que no haya una auténtica transformación en México.
Con información de Apro