Redacción Proceso
MÉXICO, D.F. (apro).- La «Secretaría de Gobernación» (PRI) dio su versión sobre el ataque de agentes federales contra periodistas de televisión el lunes pasado sobre la carretera federal Iguala-Cocula, en Guerrero.
A través de un comunicado emitido casi a la medianoche del lunes, la Segob explicó que los elementos quienes iban vestidos de civil y a bordo de un automóvil particular son “elementos de las Divisiones de Inteligencia e Investigación de la Policía Federal” quienes realizaron un operativo en el poblado de Apetlanca, municipio de Cuetzala del Progreso, Guerrero.
Actuaron, precisó, vestidos de civiles para no entorpecer el operativo en el que capturaron a un presunto responsable de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero, el 26 de septiembre pasado.
“El personal de las Divisiones referidas actuó vestido de civil y los vehículos no contaban con ningún tipo de balizado con la finalidad de resguardar la procedencia de los elementos, que realizaban sus tareas de manera encubierta”, refirió.
Según la Segob, al realizar la detención, algunos pobladores hicieron llamados y tocaron las campanas de la iglesia del lugar para tratar de impedir la acción.
Cuando trasladaban al detenido, señaló la Segob, “los elementos federales se percataron de que eran seguidos por un auto que no presentaba ningún logotipo que permitiera su identificación, por ello para asegurar la integridad de los elementos y del propio detenido, los integrantes del último vehículo del convoy policial descendieron con la intención de impedir que se pusiera en riesgo la operación”.
El vehículo al que hizo referencia la Segob era en el que se trasladaban los periodistas quienes grabaron desde adentro el momento en el que cuatro hombres armados se bajan de un vehículo gris, sin placas de circulación, que atravesaron sobre la carretera.
Enseguida, los federales apuntaron sus armas en contra de los comunicadores y golpearon los vidrios de la unidad para exigir que descendieran, pero los enviados se negaron y permanecieron adentro del vehículo grabando la agresión de los agentes, quienes se retiraron del lugar escoltados por una patrulla oficial de la Policía Federal.
El video del hecho fue difundido a través de la red social YouTube lo que orilló a la Segob a explicar lo sucedido. Sin embargo los periodistas notificaron del hecho a las autoridades y anunciaron que interpondrán una queja ante organizaciones como Artículo 19.
Según la Segob cuando los elementos de inteligencia se percataron que quienes viajaban en el vehículo eran periodistas volvieron a abordar su vehículo y partieron con el detenido rumbo a Iguala para luego trasladarlo a la ciudad de México y ponerlo a disposición de la Procuraduría General de la República (PGR).
