REFORMA / Redacción
Cd. de México (02 noviembre 2014).- En México han fracasado todos los partidos políticos pero en particular los de la izquierda, según la Arquidiócesis de México.
«Han quedado al descubierto los partidos de la falsa izquierda mexicana, que deberían ser los primeros en estar comprometidos con las clases más desfavorecidas y que, sin embargo, son los que más daño le han hecho al País», se lee en la editorial del semanario Desde la Fe, publicada por la Arquidiócesis.
En el texto, se califica a la pasada Administración capitalina, encabezada por Marcelo Ebrard, como la más corrupta de todas, por dedicarse a promover leyes inmorales que atentaban contra la vida y la familia, en vez de concentrarse en desarrollar políticas públicas para una superación económica y cultural de los más pobres.
«A estos gobernantes les preocupa más promover el uso de la bicicleta en una ciudad caótica, que solucionar el problema de seguridad y recuperar la dignidad en cientos de barrios olvidados y deprimidos de nuestra ciudad, que se han convertido en rehenes de una delincuencia que a la actual administración -también de izquierda-, le da miedo llamar por su nombre, cuando se trata de verdadera delincuencia organizada», se lee en la editorial.
También menciona que los gobiernos estatales de la izquierda, como Michoacán, Zacatecas, Guerrero y Morelos, han entregado los peores resultados, además de que han sido ineficientes y han hecho alianzas con grupos criminales, «por impotencia o por conveniencia».
Respecto a la crisis en México, el semanario sostuvo que está provocada por la desigualdad social, la corrupción, la deficiente educación y la ausencia de valores.
«La situación económica nos hace ser una sociedad disfuncional, ya que mientras que un pequeño porcentaje de la población puede darse una vida de primer mundo, más del 50 por ciento de los mexicanos vive en los límites de la pobreza, con recursos de supervivencia, y una buena parte en la miseria extrema», expuso.
«Si tomamos en cuenta que los partidos políticos tienen como única finalidad proponer programas para solucionar los problemas sociales y postular candidatos para acceder al ejercicio de gobierno y lograr los cambios necesarios, debemos decir que en México han fracasado todos los partidos políticos, porque no han buscado en el ejercicio de gobierno el bien de la sociedad, sino beneficios personales y de grupo a través de una insultante corrupción».