México, 5 de octubre 2017 (NOTIGODÍNEZ).- El régimen usurpador del asesino de Atenco, Enrique Peña Nieto, estaría reeditando el ‘Caso Monex’ a través de las tarjetas cargadas con 120 mil pesos que ha comenzado a repartir en Oaxaca y Chiapas, como parte de los supuestos apoyos a damnificados de los sismos ocurridos el 7 y 19 de septiembre pasados.
Recordemos que en 2012, durante las campañas fraudulentas para imponer a Peña en Los Pinos, su equipo de campaña repartió masivamente monederos electrónicos de tiendas Soriana y tarjetas del banco Monex -en éstas gastó casi 300 millones en total- a cambio del voto a su favor. La Comisión Investigadora del caso Monex en la «Cámara de Diputados», concluyó que, mediante esta estrategia, la coalición del PRI-PVEM rebasó por 13 veces el tope de gastos de campaña autorizado.
Cinco años después de ese monstruoso fraude, el «Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación» (TEPJF) determinó que sí hubo rebase en los gastos de campaña, aunque sólo por 5 veces y no 13 como habían calculado los «diputados», estableciendo una multa de 98.4 MILLONES DE PESOS que la coalición podrá pagar a plazos después de la «elección» de 2018. Dicha multa es mucho menor a que inicialmente se había propuesto en 2012.
De acuerdo con el portal Revolución 3.0, «senadores» de diversas bancadas denunciaron que el reparto de tarjetas del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi) que el espuriato peñista arrancó esta semana, es totalmente irregular y parecido al esquema del caso Monex.
“Este programa de tarjetas es muy parecido al que se implementó con la tarjeta Monex, es muy parecido, porque se puede ocultar totalmente el gasto, no hay control del ejercicio”, dijeron.
Asimismo, criticaron la opacidad con que se están manejando el régimen y las empresas favorecidas con la venta de materiales y la reconstrucción en la zona.
«Existe opacidad en el manejo del presupuesto, pero también sobre la decisión de beneficiar a 30 empresas constructoras”, añadieron.
Sobre el punto de la opacidad, acusaron que igualmente se desconoce el padrón de damnificados que recibirán las tarjetas, la entrega y los mecanismos para vigilar el uso adecuado de los recursos.
En tal sentido, alertaron que el apoyo de 120 mil pesos es insuficiente para financiar la reconstrucción de una vivienda, por lo que hay suspicacia sobre la finalidad real de repartir estos recursos entre la población damnificada: compra de votos.
¡Claro! ¿Qué otra cosa podría ser? ¿O en serio existirá algún mexicano en pleno uso de sus facultades mentales que piense que al usurpador le interesa apoyar a la gente?
Este lunes, el asesino de Atenco visitó Ixtaltepec, Oaxaca -una de las zonas más afectadas por el sismo del 7 de septiembre-, donde presumió la entrega de las tarjetas y encima dijo, casi reclamando, que los 120 mil pesos entregados «es mucho dinero».
«Las tarjetas y lo que se está depositando a las tarjetas, una parte, quizá la mayor parte, es… 90 mil pesos son del gobierno federal y 30 mil pesos son del gobierno del estado, que ya sumados es mucho, ¿eh?», lanzó.
Dice #EPN que el apoyo de $120,000 para damnificados de #Oaxaca y #Chiapas "ES MUCHO"… pero él cuesta a los mexicanos MÁS DEL DOBLE AL MES pic.twitter.com/7ba8Pks5wr
— NOTIGODÍNEZ (@NOTIGODINEZ) October 4, 2017
Con información de Revolución 3.0