Juan Carlos Cruz Vargas
Proceso
MÉXICO, DF, (apro).- Los acontecimientos sociales derivados de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero, además del menor dinamismo de la economía mundial, continúan deteriorando el balance de riesgos de la actividad económica en el país, advirtió el Banco de México (Banxico).
Al anunciar la decisión de política monetaria, que mantiene sin cambio la tasa de interés interbancaria (TII) a un día en 3%, el banco central reconoció el débil comportamiento de la economía mexicana:
“La actividad económica en México registró una moderación en su ritmo de crecimiento durante el tercer trimestre. Si bien las exportaciones han continuado evolucionando de manera favorable y la inversión privada ha mostrado signos de recuperación, el consumo privado sigue sin registrar señales claras de reactivación y los efectos del gasto público sobre la actividad económica no se han manifestado plenamente.
“(…) Teniendo en consideración el menor dinamismo que recientemente han presentado la actividad económica mundial y la del país, así como los recientes acontecimientos sociales en este último, se considera que el balance de riesgos para la actividad económica se ha deteriorado respecto de la anterior decisión de política monetaria”.
La institución también alertó de mayor volatilidad en el mercado cambiario, el cual ha provocado la depreciación del peso.
El Banxico precisó que en semanas recientes se registró una depreciación generalizada de las monedas de economías tanto emergentes como avanzadas frente al dólar estadounidense, incluyendo al peso mexicano. Esto obedeció, principalmente, a la expectativa de una política monetaria más restrictiva en Estados Unidos, así como a la desaceleración de la economía mundial y la consecuente caída en los términos de intercambio de múltiples países.
“En el caso de México, hasta el momento estos movimientos se han dado de manera ordenada, con niveles de operación y liquidez adecuados… Sin embargo, teniendo en consideración los elementos señalados, no puede descartarse que en el futuro se intensifique la volatilidad en los mercados financieros internacionales”, alertó.
Sobre la inflación, el Banco de México pronosticó una tasa anual de 4% en 2014, y espera que a principios de 2015 se reduzca y se mantenga en torno de 3% a partir de mediados del próximo año.
La institución encargada de la política monetaria fundamentó su previsión en el desvanecimiento del efecto de las modificaciones fiscales que entraron en vigor al inicio de 2014, la eliminación de los cobros por larga distancia telefónica nacional y el menor incremento previsto en los precios de las gasolinas a partir de enero de 2015.
En el entorno internacional, la economía mundial continúa mostrando un comportamiento débil aunque diferenciado entre los principales países. En contraste, en Estados Unidos la actividad económica ha venido consolidando su recuperación, aun cuando la desaceleración de otras economías podría moderar su dinamismo.
Mientras que en las economías emergentes, la disminución en los precios de las materias primas, incluyendo al petróleo, ha exacerbado su desaceleración.
Hacia adelante, el banco central previó un escenario de débil crecimiento de la economía mundial, la caída en los precios de las mercancías básicas y los bajos niveles de inflación. En tanto que la postura monetaria en la gran mayoría de las economías avanzadas y de algunas emergentes continuará siendo acomodaticia en los siguientes trimestres.