México, 19 de abril 2015 (NOTIGODÍNEZ).- Traicionan, joden, despojan al pueblo de sus recursos naturales… y encima le cobran la millonada por ello. Así se premian estos vándalos constitucionales por sus servicios apuñalando al país.
El diario Reforma reveló el día de ayer que, de marzo de 2014 a febrero de 2015 –periodo posterior a la aprobación de las contrarreformas–, los «diputados» federales han recibido MIL 193 MILLONES DE PESOS del dinero de los mexicanos para gasto discrecional.
De ese monto exorbitante, 311 millones fueron de “subvenciones extraordinarias”, de acuerdo con los informes oficiales de las fracciones parlamentarias. Es decir, para gastos personales que no tienen obligación de transparentar, y aunque la tuvieran, de cualquier modo hacen lo que les viene en gana.
De hecho, no es posible que los ciudadanos conozcan cuál fue el destino exacto de los MIL 193 MILLONES ni hay comprobación ante alguna «autoridad» exterior, pues la Auditoría Superior de la Federación (ASF) reportó en febrero pasado que los legisladores mantienen su negativa a abrir sus cuentas y estados financieros para ser fiscalizados. Además la ASF depende de los propios diputados, es decir, los propios rateros están a cargo de «fiscalizarse».
Por supuesto, las auditorías de la Contraloría Interna de San Lázaro permanecen en secrecía y sólo las conocen los coordinadores parlamentarios, quienes, obviamente, no van a balconear sus propios robos.
En el colmo del absurdo, Peña presumió este año la «transparencia» y la «lucha contra la corrupción» en la Alianza para el Gobierno Abierto de la ONU que, para deshonra de los mexicanos, le tocó encabezar en 2015.
Asimismo, las disposiciones en la nueva Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública, aprobada el pasado jueves por los sujetos que cobran por mantener calientes (de vez en cuando) las curules del Congreso, no aplicarán para la «legislatura» saliente, pues los propios «diputados» se dieron hasta el 30 de agosto para aplicarse la nueva ley… y ese día concluye su periodo de saqueo en San Lázaro.
De acuerdo con Reforma, las fracciones parlamentarias de la actual «Legislatura» han recibido hasta febrero de este año 3 MIL 42 MILLONES DE PESOS que han ejercido de manera discrecional.
Aunque desde la 60 Legislatura los grupos parlamentarios simulan que emiten informes financieros en forma semestral, los datos son ambiguos y no indican en qué se gastaron el dinero de todos los mexicanos.
Cada fracción, según el citado diario, tiene distintos reportes de cómo gasta las subvenciones, pero todas coinciden en que mas del 70 por ciento del dinero se reporta en una partida genérica y que no da mayor detalle, llamada “otros servicios generales”.
Al inicio de la 62 Legislatura, los coordinadores parlamentarios acordaron darse una nueva subvención, la cual es referida en reportes como “extraordinaria” se entrega conforme al número de integrantes por fracción. No obstante, ésta no se encuentra reconocida en la Ley Orgánica del Congreso.
Se ha denunciado al interior de la propia Cámara que la entrega de dicha subvención es una especie de bono para los legisladores que ha coincidido con la votación de las reformas estructurales.
El coordinador parlamentario es el responsable de la administración de las subvenciones y goza de toda la discrecionalidad para decidir sobre su destino, según el propio reglamento interno de la cámara de diputados.
Por ejemplo, del periodo de agosto de 2014 a febrero de 2015, el PRI de despachó con 231 millones de pesos. Su «bancada» cuenta con 214 legisladores quienes reportaron gastos por 230 millones de pesos en “otros servicios generales”, pero no precisa en que consiste el rubro millonario.
Sus cómplices del PAN recibieron 129.5 millones de pesos en el semestre, y reportaron 55.9 millones de pesos gastados en “otros servicios generales” sin dar detalle alguno de qué servicios o bienes se trata.
El PRD no se quedó nada atrás, embolsándose 133 millones de pesos, de los cuales 104 millones se «reportan» de forma opaca en el rubro de servicios generales, en una sola hoja de conceptos.
Y claro, el PVEM reportó 76.5 millones de pesos de las «subvenciones» entregadas durante los dos años previos. Con las subvenciones del semestre comprendido entre el primero de septiembre de 2014 y el 28 de febrero de 2015, por 41.2 millones de pesos, esa bancada dispuso de poco más de 117 millones de pesos.
El tentáculo verde del PRI –ya lo descaró Peña Nieto en días pasados al definir a su régimen usurpador como «verde»– refiere un gasto de 83 millones de pesos, de los cuales, 65.2 millones se erogaron en “servicios de comunicación social”, mientras que en el rubro de “Servicios oficiales” se reportan 17.5 millones de pesos.
Cuchara grande para los criminales más peligrosos de este país; «ajo y agua» [A JODERSE Y A AGUANTARSE] para el pueblo que los mantiene… por dejado. ¿HASTA CUÁNDO?
Con información de Reforma
