Ciro Pérez
La Jornada
México, DF. A unos días de que la ONU vote por vigésima tercera ocasión en contra del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba “parecería que hablar sobre el impacto del bloqueo es más de lo mismo, pero no lo es por el simple hecho de que el último año ha estado marcado por un recrudecimiento cruel de esta política genocida por parte del gobierno de los Estados Unidos ignorando el sistemático y creciente clamor de la comunidad internacional de poner fin de inmediato”, advirtió el embajador de Cuba en México, Dagoberto Rodríguez Barrera.
Señaló que no hay un sólo ámbito de la vida de los cubanos que haya quedado exento de la acción destructiva y desestabilizadora que impone esta ilegal política, cuyos daños totales ascienden ya a 116 mil 880 millones de dólares a precios corrientes.
“El bloqueo viola los derechos del pueblo cubano a la salud, educación, alimentación, cultura y deportes, al negar el acceso a bienes y servicios que sólo son producidos por compañías estadunidenses o sus subsidiarias, o mediante presiones y chantajes impedir las transacciones comerciales de Cuba con terceros o hacerlas mucho más onerosas”, apuntó.
“Además de las importantes afectaciones al bienestar material, psíquico y espiritual del pueblo cubano, en el último año la Oficina de Control de Activos Financieros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, desarrolló una feroz persecución de las transacciones financieras de Cuba con cualquier institución o país, con el objetivo de dificultarle el comercio exterior e impedir la inversión extranjera en la isla, a lo que se agrega el recrudecimiento a la aplicación de extraterritorialidad del bloqueo que ha afectado a grandes empresas y banco como el Royal Bank of Scotland, el banco francés BNP Paribas y la petrolera suiza Weatherford.